Recopilaciones de un diario

Historia no.5

Lo difícil no es seguir la historia, es comenzarla. Y es lo primero que pensé al momento de querer desahogarme por primera vez en semanas... Por qué hoy? Simplemente porque uno espera tanto al momento adecuado, que nos e da cuenta que todos los momentos son adecuados, y esperas tanto... que pierdes algo que jamás se recupera. Y eso que significa? Pues que uno espera tanto el momento perfecto, ya sea en decirle a la persona que la quieres, en querer esperar el mejor momento para fumar un habano, o usar el separador de libros que trajiste de otro país, incluso el escribirle al chico que te gusta, que el tiempo sigue pasando, y de repente te das cuenta que las cosas han cambiado, que quizá el momento perfecto fue ayer... que quizá, ya fue el momento adecuado, o quizá... nunca va a llegar ese momento y te has quedado estancado por esperar algo que quizá no va a suceder. Y es ahí cuando te das cuenta que no hay mejor momento que el ahora. Y cómo sabes que si? Pues yo creo que la mejor forma de contestar eso, es decir... Y cómo cojones sabes que no?. Vaya que si, vaya ironía, y en serio vente tú....
Y así como lo vi en un libro, de esos que tanto leo, y de esos que tanto te aburren, como hago para salir de Roma, si todos los caminos van a Roma? Lo mismo digo yo, cómo hago para sacarte de mis pensamientos, si todos me dirigen a ti.
Y es aquí, cuando comienzo a dañar la historia, a que era más bonito cuando uno habla de porque es difícil comenzar algo, de los momentos adecuados... y comienza a hablar de lo complicado que es pensar en alguien. Y creo que acabo acá, porque ni yo encuentro la lógica a todo esto, algún día vaya quizá y vaya que lo voy a hacer... pero quizá hoy no. (Día 45 de la cuarentena, día 1 que no se de ti).