Eyes Love You [ReitUha; the GazettE]

Azul y Negro

"El alumnado deberá retirarse a sus hogares, no podemos permitir que esta pandémia se expanda, estamos haciendo nuestro mejor esfuerzo para la protección de los estudiantes y los maestros de esta institución. Se les mandarán ejercicios y clases por medios audiovisuales electrónicos para no perder el aprendizaje."

—¡¿Cuántas veces debemos decir que las clases en linea no sirven?! —dijo Kouyou frustrado frente a su mejor amigo, en una pantalla de computadora.

—Es el gobierno japonés, aunque hagas huelga de hambre no cambiarán de opinión respecto a sus decisiones. —

—No sé que voy a extrañar más de la escuela, el receso a tu lado con los demás, o el hecho de que no voy a poder tramitar mi certificado de la prepa. Tanto esfuerzo que me tomó entrar a la maldita universidad, para que tengamos que reiniciar este semestre y tal vez hasta perder la ficha. —Se dio un cabezazo contar el escritorio, haciendo reír al rubio en su pantalla.

—Oww, ¡Me extrañas! —

—Cállate o ya no me juntaré contigo. —

-Soy tu mejor amigo, ¡Tú me adoras!-

—Hasta la proxima~ —Cerró la computadora con rapidez, estallando en carcajadas. Por lo menos hasta que el tono de llamada de su mejor amigo comenzó a resonar en su celular-. ¿Aló?~ -Canturreó burlesco.

—¡Cómo fuiste capaz de colgarme, pato del demonio! —Akira sonaba molesto, dolido, con el corazón roto en mil y una piezas, o por lo menos así describiría sus sentimientos.

—Vamos, la computadora se cerró accidentalmente. —

—No me quieras comprar con tus excusas baratas, Takashima. No tienes perdón. —dijo con una voz que parecía cortarse por el llanto.

—Bueno, muy probablemente la cerré accidentalmente a propósito. —Comenzó a reir de nuevo, escuchando la rabieta al otro lado de la linea—. Pero sabes que todo es con amor. —Suspiró, dejandose caer en la silla de lleno—. Enserio te extraño. —Soltó en un susurro. Observando a su madre parándose en el marco de la puerta, con una mano en su cintura y una sonrisa maliciosa.

—Ara Ara~ ¿Alguna novia de la que no me has contado, cielo? —Inquirió curiosa la madre del castaño, escuchando la risa al otro lado de la linea.

—Claro mamá, es tu querido yerno Akira. —Dijo sonriendo mientras activaba el altavoz-. Saluda a tu suegra, mi amor. -Dijo riendo, observando el poema que era la cara de su madre.

—Hola suegrita, ¿Todo bien en el encierro? —escuchó a Akira en la linea, el trío estalló en carcajadas.

—Todo perfecto Akira, ¿Cuando piensas venir a cenar? Deberías robarte a Kou unos días, ha estado insoportable. ¡Inclusive te nombra dormido! —

—¡Mamá! ¡No digas mentiras! —Toda la broma se volvía en su contra, sus mejillas y orejas se encendieron cuan amapolas mientras cubría sus ojos de vergüenza. La risa del par no parecía cesar.

—Ya me voy, antes de que se me salgan más trapos sucios. -sonrió de nuevo-. Un gusto saludarte, Aki-kun. —dejó un beso en la frente del menor y salió de la habitación.

—Con gusto iré a robármelo un día de estos. —Dijo mientras reía—. ¿Qué pasó, Shima? ¿Te comió la lengua el perro de Takanori? —