Una historia de amor

Capitulo único

Inspeccionó detenidamente a su alrededor. Un bonito verde repleto de sombra natural proporcionada por los arboles de sakura, arboles que casualmente se llamaban como ella. Nueva escuela, nuevos compañeros y nueva casa. Acostumbrarse a todo en un solo día era imposible, pero haría el esfuerzo por adaptarse rápidamente.

Extrañaba su antiguo hogar y el barrio donde creció. Volver a empezar de vuelta era un desafío. Ganar amigas también pareció serlo. Las que pertenecían a su clase se juntaban en grupitos de cuatro o cinco y chismoseaban de chicos o de "ella" de su amplia frente o el color peculiar de su cabello. Suspiró. ¿Por qué amargarse la vida por pequeñeces? A sus dieciséis años era una chica responsable llena de sueños y metas por alcanzar, algo como eso no sería un obstáculo en su vida. Pero lo de ganarse amistades... era otra cosa.

Necesitaba integrarse a un círculo, era horrible estar excluida. Sus ojos captaron con atención una imagen fuera de lo normal, si podía decirse, algo que uno no vería todos los días. Una escena bastante "tierna" entre dos chicos. Juzgando por sus rostros eran compañeros de su aula y parecían estar en su propio mundo aislados de la sociedad.

El chico de cabello oscuro y piel pálida tenía en sus muslos a su amigo recostado en una banca. Su cabeza boca arriba mirándolo mientras el moreno le daba pequeños gajos de manzana en sus labios. Una diminuta sonrisa se plasmaba en el azabache sin perder contacto con los iris azules de su amigo, este ultimo degustaba todo con soltura, ambos compartiendo un momento bastante intimo que abochornó a la joven de cabellos rosáceos.

—Hacen linda pareja, ¿verdad?

Casi dio un salto de su lugar al oír la repentina voz a sus espaldas, la chica se apareció a su lado con una pequeña sonrisa y se sentó, como si se conocieran de toda la vida.

—Me asustaste-suspiró, llevándose una mano al pecho.

—Ah. Lo siento, no lo hice con mala intención. Eres la chica nueva ¿Sakura, no?

—Sí...-asintió nerviosa. Al fin alguien le dirigía la palabra.

—Me llamo Yamanaka Ino, un placer-sonrió.

—Yo... Haruno Sakura-respondió más confiada.

—Sé cómo se siente, Sakura-miró al frente—Ser la nueva y temer no encajar con el resto, yo pasé lo mismo aquí también-la miró—Lo mejor que podemos hacer, es apoyarnos entre nosotras, tengo muchos amigos que les caerás muy bien una vez que ganes la suficiente confianza.

—Te amo.

Sakura dejó de mirar a Ino y giró la cabeza en cámara lenta a la pareja que estaba a poca distancia de ellas. Eran los chicos de recién, no podía asimilarlo. Se estaban besando en la boca. Dos chicos se besaban delante de medio cuerpo estudiantil sin miedo alguno a que se burlaran o los agredieran.

—Yo te amo más, Sasuke.

Quedó impactada. Y completamente sonrojada.

La joven rubia a su lado emitió una pequeña risa.

—¿Odias los gays?

La chica de ojos color jade dejó de mirar a los muchachos y se concentró en su nueva amiga.

—No. Creo que todos merecemos amar, incluso si se trata del mismo sexo-habló firme.

—Vaya, es genial. Sabes, ellos son mis amigos más cercanos. Hubiera sido triste si te escuchaba decir lo contrario. Son muy buenas personas-los miró con ternura como una madre miraría a sus hijos—Han pasado por mucho dolor los dos, para finalmente terminar juntos.