"Mister Jackson" •Devildice•

¡Party pink!

Conocido por ser el hombre más deseado por los hombres, era visto por las esquinas de los clubs y bares.

Muchos lo veían como una simple puta, pero era mucho más que eso para varios que entraban en su cama...

Después de la medianoche los faroles encendían sus luces y los clubs nocturnos se llenaban de personas, el Club Golden wings famoso por tener a las más bellas strippers del centro de InkwellHell, tenía bastante clientela y no era por presumir pues esa noche el espectáculo del rey de corazones tendría lugar a esas horas.

Las luces del escenario iluminaban el lugar, las mujeres ofrecían sus servicios y los tragos se vendían fácilmente. Noches como esas formaban habitualmente la vida de King Dice, nada nuevo para alguien que desde joven a llevado una vida así.

Cuando era adolescente fue encontrado en las calles sobreviviendo de lo que fuera hasta que lo encontraron sus ahora dos angeles guardianes, no exactamente las mujeres más santas del mundo, pero si las únicas que de entré muchos se tocaron el corazón al ver al jovencito en situación de calle.

Ambas damas de la noche acogieron al chico, criando de él y brindándole un hogar entre ellas. Ya él con la mayoría de edad comenzó a aprender la vocación en la que se dedicaban sus madres, con el dinero que ganaba las apoyaba para pagar la renta y lo cual seguía haciendo; las ama y hace lo que sea por que ellas estén bien.

La música empezaba con un ritmo suave y de entré las cortinas un joven en traje de látex negro salía para caminar por el escenario moviendo sus caderas con cada sonido del tacón, se acercaba lentamente al tubo en el centro del escenario, su acto ya había comenzado y es que era muy bueno en el table dance.

Los hombres lo observaban con atención, cada movimiento sujetando el tubo era seductor y atrayente para muchos, las miradas recorrían las delgadas piernas adornadas por unas medias altas con malla listas para ser arrancadas por cualquier patán en el club. En esos momentos el chico llevaba la corona por excelencia, era el rey de esa pista y él lo sabía, su noche de baile estaba bastante agitada pues varios hombres un tanto ebrios trataban de tocarlo mientras hacia su acto, algo de mal gusto ya que no se les permitia tocar a las bailarinas si están sobre el escenario, nada novedoso por parte de los dueños.

La música ya estaba terminando y dándole fin al espectáculo del joven King quien se despedía de los espectadores con un beso al aire, le encantaba hacer eso, volvía locos a aquellos infieles que buscaban una aventura de una o varias noches. A paso lento entró por las cortinas para bajar del escenario, sediento por a ver dado todo en ese tubo camino directo hacia el bar del club saludando a quienes lo veían desde los asientos con bebidas en mano, las luces que cambiaban de color llenaban al lugar con un aura de lujuria y el pecaminoso deseo de terminar en un cuarto de hotel hasta el amanecer.

Ya cerca del bar tomo asiento frente a la barra mirando a sus alrededores como si algo estuviera mal en ese lugar.

— Wheezy, ¿Qué tal te va? — pregunto mirando al bartender quien servía tragos en varias copas.

— Buenas noches King, que te puedo decir la noche en este club siempre es agotadora — sonrió el hombre, dejando las copas a la mesera para seguir hablando con su amigo — ¿Qué te sirvo? — las manos de Dice estaban inquietas y su miraba recorría los licores que se encontraban en la barra, un poco indeciso sonrió al ver la botella de tequila para al fin señalar lo que pediría.

— Bien, solo espérame unos minutos y ya te lo entrego — al decir eso se fue a llevar unas bebidas ya preparadas a los clientes de las mesas, el joven pensaba en la larga noche que le esperaba, había mucha gente y la inquietud volvía a él pues sin duda alguna no podría tomarse un descanso después de este tragó; tan sumergido estaba en sus pensamientos que la presencia de su amigo no la había notado hasta que fue tomado del hombro, sorprendido por aquel toqué miro a quien lo había tocado, calmandose al ver al barman que reía por la expresión del dado.