Cap. 4

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Afortunadamente ella pudo terminar la tarea justo antes de que comenzara a venir el resto de las personas que si se habían levantado en un horario "normal". Así que deje de mirarla tanto, y eso es porque ya había terminado y no necesitaba mas mi ayuda, por eso deje de mirarla, si, era eso. Las clases comenzaron, la primera clase era mate...maticas y todo transcurrió de manera normal, comenzaba una clase y todos entraban al salón antes de que el maestro entrara, es horrible tener que pedir permiso para entrar, y cuando acababa la clase todos salían del salón, como si te regalaran algo por estar afuera del salón. Naoko y yo (Me llamo Kodoku, por si se les olvido) siempre nos quedábamos adentro, y yo tratando de armar una conversación, bueno, yo supongo que es porque nunca antes lo había hecho, pero fue increíblemente difícil, soy malísimo para esto, no se rían, no es gracioso, a ustedes les pasaría lo mismo si se encontraran en la misma situación (Aquí es donde les digo. ¿Qué hubieran hecho ustedes?). Esto es patético, simplemente mi mente se quedo en blanco. Hablamos del clima (¿Es en serio?) y hablar de la escuela como que no tiene sentido ya que estamos en el mismo salón y nos ha pasado prácticamente lo mismo así que queda descartado. El día continuo avanzando (Ni modo que se detuviera) y tuvimos una clase libre y para hacer conversación dije lo primero que me vino a la mente.

-Es un poco raro que todos salgan del salón a excepción de nosotros.

-E-en realidad n-no... no tanto.

-¿Crees que sea para platicar?

-Pero eso se puede hacer aquí.

- Tienes razón pero... tal vez sea porque se sienten más cómodos afuera.

-...

Ella dejo de hablar y yo continué

-¿No quieres salir un rato?

-¿Para que?

-No lo se, tal vez a solo dar un paseo, ir a la tienda, las posibilidades son infinitas. Solo ven conmigo

-¿Tu quieres que...

-Si, quiero que me acompañes.

Volví a adelantarme a la conversación, creo que se acostumbro no me dijo nada.

Y así ambos salimos y caminamos hacia la tienda de la escuela, esta cerca, son como casi 2 minutos caminando y pedí un te, de jazmín (No diré la marca), voltee a ver a Naoko, estaba tímidamente a mi lado en silencio y por alguna razón me sentí generoso o no tenia en que gastar el dinero, no se que fue exactamente lo que paso, algo me impulso a hacerlo, aunque no se lo que fue.

-¿No quieres algo?

-Es que... Yo no tengo...

¿Se refiere a que no tiene dinero?

-No importa yo lo pago, pide lo que tu quieras.

Sonreí

-...

Guardó silencio como sin saber que es lo que debería de pedir, note que miro el té que estaba en mi mano.

-¿te gusta el té?

-¿Eh? Si, si me gusta

-¿Me puede dar otro té?

Así fue como pedí otro té para ella, pague y le di su té. Luego caminamos de regreso al salón de clases. Yo sentí la necesidad de comprarle algo, tanto que se me había olvidado que ya no tenia dinero para el autobús hasta ahorita, pero al ver esa hermosa sonrisa en el rostro de Naoko se me olvido mi preocupación, solo quiero seguir viendo esa preciosa sonrisa. Para los lectores que están pensando que fue muy tonto gastar todo mi dinero en ella de esa forma déjenme decirles que no me importa, no me arrepiento de nada y solo por su sonrisa puedo decir que valió la pena. Nos quedamos afuera del salón hasta que nos terminamos los tés, y obviamente tiramos el envase vacío en bote de basura (Cuiden el planeta amigos). El resto del día fue normal. Acaban de terminar las clases y ambos caminamos a la parada del autobús, fue entonces cuando volví a recordar que ya no tenía dinero (Que cosas ¿no?). Así que antes de que llegara el autobús tuve que inventar una excusa para no subir, que no fuera el se me acabo el dinero por comprarle algo (Seria patético).

-Este... Nos vemos mañana

-¿Por qué...

-Es que...

Una excusa rápido.

-Tengo un asunto que resolver antes de volver a casa.

La mejor excusa que se me ocurrió.

-Te acompañe hasta aquí porque me quedaba de paso.

Y después de so llego el autobús.

-N-nos vemos mañana.

Ella se despidió de mí y yo me despedí de ella. Ambos nos despedimos el uno del otro con una sonrisa. Ella subió al autobús y se fue en el y yo mientras estaba en su campo de visión hice como que caminaba a algún lugar del lado contrario a donde iba el autobús, y después de una calle, volví de regreso y me dispuse a irme caminando a mi casa, y eventualmente llegare... algún día.

Kodokuna (en edición)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora