Recuerdos...
Lo único que me queda de él, los momentos más felices de mi vida los tuve a su lado.
Nuestro primer beso recuerdo esa sensación tan extraña, ese movimiento extraño en mi estómago, ese hormigueo en mis labios, mi corazón queriendo salir de mi pecho, mis piernas debilitadas sentía que en cualquier momento caería.
El sabor de sus labios...
Ese exquisito sabor al que soy y seguiré siendo adicto siempre.
Recuerdo que eran tan suaves y calientes, demandantes era otra forma de describirlos, cuando él me besaba sentía que me deseaba tanto como yo a él.
En ese preciso momento todo a nuestro alrededor desapareció solo estábamos él y yo diciéndonos lo que supimos desde siempre, que nos amamos, siempre fue así.
Recuerdo su mirada...
Esos profundos ojos color whisky, me miraban como si fuese el ser más maravilloso que pudiese existir, me miraban con amor.
Recuerdo su roce...
Cuando me contemplaba y acercaba a él, queriendo estar lo más juntos posible, deseando jamás separarnos.
Esa vez supe que no había retorno, nunca querría alejarme de su lado aunque el me lo pidiera no podría, ese sentimiento que te pide siempre más, con el cual nunca estarás satisfecho siempre querrás más de esa persona, no descansaras hasta tener todo de él.
Recuerdo nuestra primera pelea...
Fue por algo tan estupido que ni siquiera lo recuerdo pero si recuerdo lo que sentí cuando me dijo que me fuera, recuerdo que todo ese enojo que me quemaba por dentro cambió... se volvió tristeza, dolor, desconsuelo, desesperación y por supuesto arrepentimiento, vergüenza, culpa.
Recuerdo que esa noche no pude dormir solo lloraba me sentía muerto por dentro, el miedo de perderlo por siempre me carcomia, sentía mi piel arder de enojo, de enojo conmigo mismo, sentía que lo había perdido todo. Por qué eso es él para mí todo.
Sin importarme su respuesta me dirigí a donde el se encontraba, él también se veía triste y tan solo pensar que el causante de eso fuera yo hizo que me diera asco.
Me acerqué a el sin decir nada solo coloque mis manos en su pecho y me acerque a sus labios los roce lentamente y al separarlos ligeramente solo susurre un perdóname.
El miedo a su rechazo llego cuando todo quedó en silencio, cuando estaba por aceptar mi derrota e irme volvió a unir nuestras bocas en un beso lento y profundo. Desde esa vez jamás hubo otra pelea.
Recuerdo la vez que me hizo suyo...
Fue lo más maravilloso que he sentido, me sentí especial, él se preocupaba por mí como si fuese lo más delicado que pudiese existir no tuvo prisa, él quería que fuese especial para mi y lo logró.
Nadie me hará sentir lo mismo que sentí con él.
Estando con él la acción más insignificante se volvía lo más valioso que pudiera existir.Y el lo sabia, sabía que sin él mi vida sería una tortura y aún sabiendo eso lo hizo.
Me dejo...
El sabia que el día que él llegase a faltar todo mi mundo se vendría abajo y aún así lo hizo.
Pero no estoy enojado con él, porque se que esta vez yo no era la prioridad, millones de vidas estaban en juego y el tomo la mejor decisión para todos.
Su vida por la de los demás, el siempre fue así...
Pero esta vez olvido que su vida ya no era solo suya, su vida era mi vida, y cuando esta terminara la mía quedaría igual.
Y ahora que se fue lo único que tengo de él son solo recuerdos y esa camisa blanca que le quedaba a la medida aquella que olvido en mi habitación el último día que estuvimos juntos aún conserva esa exquisita fragancia que tanto le gustaba.
Y ahora estoy en la oscuridad diciendo su nombre, esperando una respuesta que nunca llegara.
Estoy perdido en nuestros recuerdos...
~Fcv~