Recuerdo esa noche, primera de muchas, donde fui iluminado por un lucero deslumbrante que me cegaba, sentí más que una estrella observándome de cerca, sentí como pasaron frente a mis ojos lentamente dos y tres universos, insoportablemente bello, un lucero disfrazado de mujer, se sonrojaba como si estuviera en el fondo de la botella, nunca imaginé tal hazaña, que al sonreír de repente invadían mi cabeza los recuerdos más lindos de mi vida en solo cuestión de segundos. Nunca antes me había sucedido, percibí algo inusual en esos ojos que decían mucho más que un libro. Inexplicable momento grabado en mi mente. Soy esa persona quemada por una estrella y capaz de volverse a quemar por tal de que siga irradiando esa luz más fuerte que un Sol...
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La luna sobre nosotros
RomancePara él mi sonrisa era perfecta y para mi eso era suficiente... Amor...dolor...escritos que se inspiran en la nada de serlo todo