De vuelta a la primera noche

Una noche

Yo estaba bien tranquilo, antes de que mis sentimientos fueran a dar un giro tan inesperado. Me pase la noche pensando, y preguntando, ¿Será para bien o para mal? Aunque sigo sin poder entender sus razones para ser ese ángel que siempre quise tener en mi vida.

La empecé a conocer desde el momento que me respondió ese mensaje, aparentaba no ocultarme nada. Una conversa provechoza. Creamos un dialogo, en el cual nos entendíamos muy bien. Le pregunté por su nombre, me respondió amablemente "Jessica". No le molesto cuando la llamé Jess. Me pidió el mío y le dije exactamente, "me llamo Bixentesteed pero es mas facil decirme Steedy". Pues, fueron en esos segundos que empezo a ocurrir una magia que me dejo perplejo por la noche entera del viernes, cerca de la mañana entrante del sábado (entre las 11pm y las 12 am). Por esa noche me sentí magnifico, pero también me senti atemorizado. Porque me llamaron la atención algunos detalles, para no decir que parecían raros detalles. Me fijé que la cuenta había tenido pocas publicaciones y la primera publicación era de hace muy poco tiempo. No habló de días sino de muy pocas horas. Ella me dio a entender que por alguna razón le encantaba hablar conmigo, mientras que nunca antes habiamos hablado (o al menos no recuerdo eso). Pues, me empecé a cuestionar hasta el punto en donde llegué a pensar que era una trampa para mi, (que paranoia). No, no lograba creer que alguien me aceptará tal como soy. ¡Con lo complicado que soy! Además que no quería aceptar que existiera una chica que tuviera ni tantito de las caracteristicas ideales para mi, mientras que ella poseía demasiado.

Al instante de que se desconectó y nos dijimos buenas noches, me puse a escribir esto. Tambien reflexioné sobre muchas cosas, pero lo más arriesgado, fue andar extrañando el beso de buenas noches que me tiro por el vocal del instagram.
Sus fotos no me gustaban, me prometió algunas para el día siguiente y una galeria plena para el miercoles siguiente. Pensándolo bien su historia me empezó a cuadrar, aunque eso no impediría que yo fuera precavido con alguien que supo llegar tan rápido a mi corazon, sin pasar fronteras y sin haberla conocido en persona. Eso me dejaría sin sueño y repasando los mensajes de esa noche.
Me contó que tenía novio, pero nunca dejé de regresar a ese 2 de agosto, a la luminosidad de mis ojos cuando ella me empezaba a brindar algunas letras, que me hicieron verla como mi chica perfecta.