UNO

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Era hora de partir, era hora de dejar esa vida tranquila que llevábamos mi padre y yo para aventurarnos a cosas nuevas que esperábamos fueran buenas decisiones

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Era hora de partir, era hora de dejar esa vida tranquila que llevábamos mi padre y yo para aventurarnos a cosas nuevas que esperábamos fueran buenas decisiones. Dejábamos esa isla que me vio nacer y crecer, que se llevó los mejores años de mi padre, y que vio morir a mi madre, la isla de Jeju. Nuestro próximo destino, Seúl.

Era la primera vez que estaba ahí, todo era tan distinto, toda la gente parecía que iba rápido, parecía que nada les importaba más que llegar a su destino. Me gustó el espacio de las calles, aunque extrañaba mucho el aire limpio de Jeju.

Llegamos a nuestro pequeño cuarto que mi padre pudo conseguir con trabajos, no era la gran cosa pero con el paso del tiempo teníamos en mente mejorar.

Nuestro principal motivo de llegar a Seúl fue el trabajo, a mi padre le ofrecieron algo mejor que ser pescador, además yo tendría oportunidad de por fin estudiar una carrera universitaria, eso me motivaba mucho pues siempre quise poder hacerlo. Teníamos fe de que todo iría bien.

No tenía más de 50 metros cuadrados ese pequeño cuarto, estaba en muy buenas condiciones y a pesar de que tenía aire acondicionado se sentía asfixiante estar ahí, mi padre lo entendía y solo me sonreía forzosamente mientras palmeaba un poco mi hombro haciendo una mueca de optimismo, de que todo mejorará pero, ¿Por cuánto tiempo?

Mi padre sacaba de las cajas las pocas cosas que teníamos en cuanto a loza y ollas y las acomodaba tranquilamente en la pequeña alacena que se encontraba junto a una pequeña estufa, mientras yo sacaba toda nuestra ropa y la acomodaba en el pequeño closet que había en el único cuarto de la vivienda, también saqué la poca decoración que teníamos como fotos y objetos de valor, sonreía al ver las fotos de mamá que aunque no tuve la dicha de conocerla sentía que ella siempre estaba conmigo, mi padre decía que no solo me parecía a ella en el físico sino que en mis actos, teníamos el mismo corazón, como si a la hora de nacer me hubiera trasmitido todo su ser.

-voy a buscar algo para cenar Chaeyoung, ¿quieres acompañarme? –me miraba mi padre mientras tomaba la manija de la puerta

-claro –me levanté y dejé lo que estaba haciendo para ir con él, salimos un tanto temerosos pues el barrio era algo solitario pero pronto tomamos confianza al llegar a una calle llena de gente donde habían muchos comercios de comida, mi padre miraba asustado los precios de todo pues no teníamos mucho dinero

-no te preocupes, si quieres podemos ir por un ramen –le sonreí mientras nos deteníamos en una tienda de auto servicio

-esa comida no es comida... -me miraba molesto y yo sonreí

-no tengo mucha hambre papá, anda vamos aunque sea por eso –lo tomé de la mano y entramos a comprar nuestro ramen, nos sentamos en una mesita que estaba afuera del lugar, platicábamos de todo mientras comíamos hasta que un tipo muy bien vestido se acercó a nosotros, obviamente nuestra reacción fue asustarnos

-¿se le ofrece algo? –mi padre se ponía alerta

-que tal, soy Kim Min Lee y trabajo para la S.M. Entertainment, ¿podría hablar con ustedes? –el hombre no dejaba de mirarme insistentemente con una extraña sonrisa, cosa que me aterró

-¿la SM que? –mi padre se asustaba cada vez más, de inmediato el hombre supo que no éramos de Seúl, nuestro acento de Jeju nos delató así que se relajó y sonrió más amablemente mientras tomaba una silla para sentarse con nosotros

-le explico, la empresa se dedica al entretenimiento, cantantes, actores, bailarines... bueno el punto es que la señorita tiene perfil para ser algo de eso –me miraba insistentemente

-¿Qué mi hija qué? Disculpe señor pero mi hija no sabe cantar, ni bailar, ni nada de esas cosas –mi padre se alteraba cada vez más

-¿puedo saber tu nombre? –se dirigía personalmente a mí el hombre, y yo como buena hija miraba a mi padre como preguntándole si podía responder

-se llama Park Chaeyoung –mi padre respondía y yo bajaba la mirada

-¿sabe que su hija tiene un buen perfil para ser modelo? O tal vez tiene algún talento guardado y no lo ha descubierto –seguía el hombre

-mire señor... nosotros no queremos... -el hombre interrumpió a mi padre

-le dejo mi tarjeta, si les interesa llámenme para que vaya su hija a hacer audición a la empresa –el hombre sin decir más se levantó y se retiró no sin antes inclinarse ante nosotros, hubo un silencio incomodo mientras mi padre me miraba a mí y a la tarjeta que le había dado el hombre

-¿puedo verla? –estiré la mano y mi padre me la daría con recelo

-hija, creo que tenemos que hablar de tu escuela, ¿has pensado en escoger alguna carrera? –al parecer mi padre buscaba que me aferrara más a alguna carrera universitaria que a la idea absurda de ser "figura pública"

-no lo sé, mañana iré a ver las distintas carreras y los planes de estudio para ver por cual inclinarme –miraba a mi padre que estaba terminando su sopa

-está bien, vámonos ya antes de que llegue otro loco a abordarnos sobre otra cosa –se levantaba de inmediato y yo me reía por lo paranoico que se había visto, caminamos hasta la casa y nos acomodamos para dormir, mi padre me había dejado el cuarto para mí, mientras él se acomodaría en colchonetas en la parte de afuera, mañana sería un día pesado para mi padre pues entraría a trabajar a una constructora, su sueldo se triplicaría pero sería muy pesado para él, pero lo hacía para que yo pudiera estudiar como él tanto quería.

Inesperado // PCY X PCY // EXO & BLACKPINKDonde viven las historias. Descúbrelo ahora