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Estaba caminando hacia el campo de fútbol, veía a los chicos del equipo practicar algunas jugadas mientras las animadoras hacían piruetas y esas cosas. Subía las gradas mientras veía a Harry mirar su celular atentamente y sonreía hacia este mientras escribía.

-Hola Romeo, ¿Julieta te esta escribiendo?- lo moleste, el simplemente me saco el dedo corazón de su mano, solamente para mostrar que estaba en lo cierto y también lo mucho que me ama, creo.

-Callate, además ¿porque Romeo y Julieta? ¿No seria Romeo y Romeo? Ya que los dos somos chicos, no lo se, déjame en paz Vero- dijo y volvió a centrarse en su celular.

Vicioso de mierda.

No me quedaba mas opción que mirar al campo, vi a Scott saludando donde yo me encontraba, hice un movimiento de cabeza y acomode el poleron que llevaba encima, dirigí mi mirada hacia las animadoras.

Y la vi.

Ella no me estaba mirando, estaba hablando con otras de sus compañeras, agradecí un poco eso, estábamos en una "situación extraña" y por "situación extraña" me refiero a que no hemos hablado o algo por el estilo, bueno no me puedo quejar, es un alivio ya que ¿Que le diría? No puedo ir y decirle "Hola, sabes he estado enamorada de ti hace mucho tiempo y quiero besarte hasta que ya no tenga aire en mis pulmones, además de tener una casita con dos perros y dos gatos" ¡Claro que no puedo ir y decirle eso!

Como habíamos terminado las clases y los chicos estaban que salían de sus prácticas, cabe decir de que Harry y yo no tenemos mas vida social que esto, iríamos al centro comercial ¿Porque? Porque ninguno tenia nada mejor que hacer y Ashley quería comprar ropa.

Le pedí a Harry que me sacara algunas fotos para mi Instagram, le robe la chaqueta del equipo a Scott y los lentes de sol a Allyson, ¡Vamos soy una hermosura! ¿Como nadie cae a mis pies ahora mismo?

Baje las gradas, cuidadosamente claro, y me acerque un poco en donde estaban las animadoras, y literalmente cayo alguien a mis pies, ¡Ahora quiero que un millón de dolares caiga a mis pies! ¿No? Bueno, ni los quería.

Ayude a la chica, voy por la vida cayendo en cualquier situación, es mejor ayudar al prójimo para que después te ayude.

-¿Estas bien? Oh que estúpida soy, claro que no estas bien, te haz caído- dije ayudándola con las dos manos viendo si podía pararse bien.

-Eso creo, me duele un poco la pierna pero... wow- me miro por primera vez, atiné a sonreírle.

-¿Hola?- la chica no me respondía ¡Marta la ambulancia! Pase mi mano por delante de su cara y respondió.

-Hola ahí- sonreí otra vez para que esto no se volviera raro.

-¿Te duele algo?- la chica estaba roja.

-No ¿y a ti?- me pregunto, me reí- digo...- empezó a murmurar para si misma.

-¡Vero!- escuche a dos voces llamarme, vi a Allyson y Alexa venir hacia mi, viene Alexa hacia mi, ¡Viene Alexa! Idiota se nos cae la chica.

La chica al parecer todavía seguía algo mal por el golpe así que fui a buscar una toalla y agua, ¿Porque? No lo se. Regresé donde estaba la chica, que me regalo una sonrisa, también estaban Ally y Alexa, pero estas dos solo se miraban mal. Le entregue las cosas a la chica mientras la entrenadora llegaba donde estábamos.

-Williams ¿esta bien?- La entrenadora se acerco a la chica.

-Eso creo, me duelen las piernas un poco- Ella miro a la entrenadora

-¿Alguien puede ayudarla a llevar sus cosas a enfermería?- Pregunto la entrenadora, nadie se ofrecía.

-Yo puedo- dije- ¿Puedes caminar o duele? Porque si quieres puedo cargarte- le dije.

"Tu torpe enamorada"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora