Habia una vez dos naciones lejanas del oeste. Que tenian la misma extención de territorio, con unos habitantes desiguales y unanimes.
Otra de las deferencias en ambos imperios era su ejercito; uno tenia un ejercito mas amplio y fuerte, más entrenados. El otro tambien lo era pero no en demacia.
Los dos imperios no vivian en buenos momentos, habia un odio en ambos imperios., siempre queriendo extender sus tierras hasta donde no se podia y en el comercio de mercancias siempre habia problemas. La guerra se debia desatar en algun momento, eso lo sabian de sobra ambos reyes.

Por su parte el rey Kim decidió conspirar en contra del reino vecino. Usurpar su poder.

Corria el año 412, en el que el imperio Kim compró con miles de monedas de oro y con promesas en la lengua, a los comandantes y generales en altos cargos de la nación vecina, quienes junto con el ejercito que comandaban traicionarón a su rey por unas simples monedas de oro.

El golpe a la nación vecina se dió meses después de lo planificado. El ejército abandonó al imperio Min, la nación quedó desprotegida y el país vecino atacó, imediatamente invadió la nación mientras los ciudadanos y pobladores quedarón horrorizados y desprotegidos.

Algunos fueron esclavizados y otros abandonados. Muchos huyerón a las provincias más lejanas, y a los bosques para no ser torturados ni abusados y aún peor asesinados o llevados en calidad de esclavos.

Las principales ciudades quedarón devastadas.
Y despues de semanas el polvo y las ruinas ya estaban cubriendolo todo.

El rey Min, la reina y el principe quedarón apricionados y enviados al pais vecino. Sin derecho a hablar. Mientras tanto el imperio Kim sonreia victorioso, aprovechando y explotando las riquezas naturales del país vecino que ahora habia pasado a su poder.

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