Cuando volvimos, pensé que era yo la que tenía que cambiar para poder estar bien los dos, fui tonta y cambié por ti, y tu en vez de valorarlo me destrozabas con cada palabra y acto que hacías. Dejé de quedar con mis amigas porque no te gustaba que saliera si no era contigo, dejé de hablar con toda la gente que me hablaba, no era la misma desde que volví contigo, sólo me centraba en ti. Y quizá ese fué el error, darte esa importancia que jamás te mereciste.