Amor inesperado

Capitulo 2

El resto de la tarde fue común. Dustin hacia su parte del expediente y yo la mía. El ambiente de la oficina me agrada, ya que siempre hay gente moviéndose, hablando, o riendo, y mis vecinos de cubículo son muy agradables.

En el cubículo 23 (a mi izquierda) están Erika y Fernanda.
Erika es una chava pelirroja, alta, y de grandes ojos marrón  (que hacen juego con sus pecas) y Fer es chaparra con cabello largo de color negro, aunque a veces le da por pintarlo de colores dependiendo de su estado de humor.
En el cubículo 25 (a mi derecha) están Courtney y Diego. Courtney es conocida por su amor a la bebida y las apuestas, lo bueno es que sabe jugar y rara vez pierde. Diego es súper sarcástico y fan de los cómics, a veces en la oficina creen que hay un adolescente en vez de un profesionista de 26 años.

-Oye, ya casi dan las 6 PM, ¿Ya acabaste lo de hoy o aún te falta? -Me pregunta Dustin con un tono exhausto-

+Yo creo que me quedaré hasta tarde, tuve problemas con la base de datos y parte de mi trabajo se borró

-Bah, que mal. Si quieres te espero, sirve que hago tiempo y hablo con Courtney

•¡Ya te oí, idiota! Si no tienes nada que hacer, mejor ve a traerme un café a la cafetería de enfrente. -Courtney sonaba un poco molesta, y claro, llevaba 1 semana sin tomar tequila, vodka o ron ya que el trabajo la ha estado consumiendo y no ha podido ir al bar.

-Sólo iré porque yo también quiero algo de la cafetería, no porque tú me lo ordenes. ¿Quieres algo Mathew?- Ryan solo ponía su típica cara de regañado, pero no le importaba, él está enamorado de Courtney y siempre está haciendo lo que ella ordene, no importa su humor.

+Jajaja, si, un café y un cupcake de mora azul. Necesito algo para aguantar hasta tarde.

-Bueno, ahorita vengo. -Dustin se iba mientras le lanzaba un beso a Courtney, a lo que ella solo lo miraba con cara de odio.

Mi mente sigue pensando en el tipo misterioso de anoche ¿Qué habrá pasado? ¿Intentó tocarme y lo golpeé? ¿O solo por accidente? Ojalá pudiera recordar...

-Hey, Mathew. -Era Diego, asomándose por la pared del cubículo- ¿Crees que podrías ayudarme con estos datos? No entiendo que hay de mal en las fórmulas que no me da los datos bien.

+Si, espera.

Salgo de mi cubículo para ir al #25 y antes de entrar noto que el Sr. Montgomery está al fondo del pasillo con una secretaria pero viéndome  con una sonrisa seductora. ¿Que pasa en su mente? En la mañana me veía como si fuera un extraño ¿y ahora con una sonrisa seductora? Sí que es raro ese señor.

Llego al cubículo de Courtney y Diego y lo ayudo con su problema

-Aaah, gracias. ¡Eres mi héroe! No sé que tenía mal con los datos que no daba bien el resultado

+Escribiste al revés las fórmulas, menso. Jaja. Sólo lee bien antes de meter fórmulas.

°Cielos,Diego. Si pusieras la misma atención a tu trabajo que a los detalles de las películas de Marvel, acabaríamos nuestro trabajo a tiempo...-Courtney sonaba exhausta y mal humorada

-Y si tú acabaras tu parte a tiempo en vez de salir temprano para alcanzar la hora feliz en el bar Sweet Strawberry, entregaríamos en tiempo y forma los expedientes y así el Sr. Montgomery no nos regañaría.

°Shhhh¡Cállate! -le dijo Courtney susurrando- sabes que el Sr. Montgomery tiene buen oído, y si nos oye nos dejará más trabajo.

Courtney se asomaba para ver si el Sr. Montgomery estaba cerca o no, pero para su suerte él ya no estaba al final del pasillo.