Capitulo 1

519 12 0
                                    

-R: Mira James, sé que tu amabas a Natalí

-M: Todos la amábamos

-J: Me están asustando, ¿Qué ocurre? -Dije  ATERRADO-

-R: Había algo que Natalí tenía algo que no quería que sepas

-M: Ella no quería verte sufrir

-J: No entiendo a que se refieren -Dije confundido y a la vez alarmado-

-R: Ella tenía una extraña enfermedad -Suspiró- llamada “El Síndrome De La  Bella Durmiente”

-J: ¿El Síndrome De La Bella Durmiente?

-M: Así es -Dijo tragando saliva- es una enfermedad muy extraña, 1 de cada 10.000 personas la padece. Consiste en que… Al cumplir los diesiseis años caerá en un coma profundo, del que nunca despertará, pero no es como los cuentos que “el beso del verdadero amor la salva” no tiene cura -Dijo mientras una lágrima atravesaba su pálido rostro-

-J: ¡¿Qué?!

-R: Llegó su hora James, la amabas, todos lo sabemos, pero llegó la hora de que la dejes ir en paz…

-M: Ayer, antes que todo esto sucediera me dijo que te entregue esto -Le da un sobre- Decía que lo leas cuando tú estés solo en tu habitación.

Empecé a llorar, perdí a la mujer más importante de mi vida ¡¿Saben cómo se siente eso?!  Por si no lo saben, SE SIENTE HORRIBLE.

-M: Cariño, deberías ir a tu casa, y descansar un rato.

-J: Eso creo -Dije levantándome del sofá- Sr. y Sra. Ross fue un placer tenerlos como suegros. -Dije mientras una lágrima atravesaba mi rostro-

-M: Ay cariño, no llores -Me abraza- Nosotros siempre estaremos contigo, para cualquier cosa que necesites.

Me despedí de Richard y Miranda, me subí al coche que mis padres me regalaron por mis 17 años y conduci hacia mi casa, cuando llegué estaban mis tios y primos, pues… era también el cumpleaños de mi padre…

-Tio: ¡Hola James!

-Tia: Oh!! Mi bebé! ¡Qué grande estas!

-Abuela: Estas muy delgado, debes comer algo -Dijo apretando mis mejillas-

-J: Disculpen pero… -Apreté fuerte la carta- Debo ir a  mi cuarto

-Mamá: Pero hijo! Ya fuiste con Natalí, ahora pasa un poco de tiempo con tu padre, es su cumpleaños.

-J: -Respiré ondo- Esta bien.

Me dirigí a la cocina donde estaba él.

-J: ¡Feliz cumpleaños papá! -Dije con una sonrisa falsa-

-Papá: Gracias hijo -Abrazo- Y dime... ¿Cómo esta Natalí? Se que querías pasar el día entero con ella, pero sabes que me quedan pocos cumpleaños para celebrar junto a ti.

-J: Papá, te quiero, pero prefiero no hablar de ella ¿Si? -Dije un poco triste mientras seguía presionando con fuerza la carta que me dio su mamá-

-Papá: Uhh … bueno, no quiero hablar de algo que no te guste, pero cualquier cosa que necesites estoy aquí para ti, si necesitas hablar o cualquier cosa

-J: Gracias papá -Lo abrasé- Subiré un rato a mi habitación ¿Si?

-Papá: Claro… ¿Te llamo para comer?

-J: No tengo hambre

-Papá: Pero debes comer algo

-J: -Tragando saliva- comí en lo de Natalí

-Papá: Está bien, despídete de la familia

Fui nuevamente al comedor. me despedí de mi familia, mi abuela me apretó otro poco los cachetes y subí lo más rápido posible.

Me recosté sobre mi cama, se sentía vacío, no la tenía a mi lado, extrañaba sus besos, sus caricias, la extrañaba… Abrí el sobre con mucho cuidado, pero primero admiré el olor, era el perfume que tanto amaba que use. La hoja que contenía era de color marfil, con unos detalles hermosos en las esquinas…Cuando leí la carta que me había hecho quedé boquiabierta, su contenido era fuerte, me hizo llorar, y eso que no soy un hombre que demuestra tan fácilmente sus emociones…

Un Nuevo ComienzoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora