Estúpido enamoramiento [Tamura Yui] -FINALIZADO-

Capítulo 17: Sexo oral

Ryu y yo vamos al cuarto de Kashima después de desayunar. Yo no iba a ir, pero Ryu ha asegurado que no pasa nada, que puedo acompañarlo. Kashima y él son muy cercanos, pero no me molesta, no veo que haya nada más allá de una buena amistad, incluso si se han acostado. Yo me he acostado con todo el club menos los de primero, así que no soy quien de quejarme, tampoco.

Pero Ryu solo es mío ahora.

—Buenos días, Tamu-senpai, Ryu-senpai—

—Buenos días—

Nos sentamos en la cama, expectantes, queremos saber lo que ha pasado con Toono y con detalles. Pero el muy santurrón no habla, que irritante. Ryu se ríe y le dice que hable, que estamos intrigados.

—Bueno, pues ayer... Toono y yo tuvimos sexo oral por teléfono—

...

¿Huh?

Ryu se tira hacia atrás en la cama, tratando de contener una carcajada. ¡Yo estoy molesto! Me había imaginado que el mocoso se la había chupado a Kashima o al revés, me siento timado.

—¿Por qué ponéis esa cara?—hace un puchero

—Jo, eres tan tierno Yuu, y tan inocente. Ay, no puedo—Ryu comienza a reírse tanto que acaba con lágrimas en los ojos

—¿Te parece tierno?—arqueo una ceja—Ya veo—

—No te enfades, tú eres el más tierno del mundo, amor.—se recuesta, para mirar a Kashima—Yuu, eso no es sexo oral, el sexo oral es lo que te hice a ti cuando nos acostamos—

—¡SE LA CHUPASTE!—exclamo, molesto

Ryu resopla y tira de mi, que quedo boca arriba sobre la cama y se coloca sobre mí. Kashima observa todo en silencio. Me sonrojo al ver como los ojos rojos de Ryu se oscurecen y se pone serio.

—No me obligues a profanar la cama de nuestro kohai, porque lo haré Yui—

Mierda, quiero que me la meta ahora mismo. Aparto la mirada avergonzado y me disculpo por mis quejas, se supone que dije que no iba a ponerme celoso si no tengo motivos Y no los tengo, Ryu solo me toca a mí.

—Lo siento—repito

—No pasa nada—besa mi mejilla, apartándose—Igualmente, ¿cómo llegásteis tú y Toono al sexo telefónico?—

—Pues lo cierto es que no lo sé, lo llamé porque quería oír su voz antes de dormir y...Toono descolgó y su voz se oía muy bonita, estaba adormilado y me pareció tan tierno que me excité. Le dije que estaba erecto y él me llamó cerdo, pero me dijo que si me iba a masturbar pensando en él, él tenía derecho a oírlo. Al final acabamos masturbándonos juntos, sus gemidos son increíbles, me hizo quererlo todavía más—

—Mira tú, y parecía tonto el niño—murmuro, refiriéndome a Toono

—Bueno, es algo bueno teniendo en cuenta como es Toono, aunque me sorprende. Creía que el niño de ojitos inocentes no hacía esas cosas que tacha de inmorales. Ya no va a poder ser cura—se burla Ryu

—Estoy muy emocionado, hoy desayunamos juntos y, aunque estaba avergonzado, no me evitó. ¡Hasta dejó que tomara su mano!—

—No sé de qué hablasteis cuando yo pegué a Yaguchi, pero esa conversación ha sido bastante reveladora para Toono, estoy seguro—

Kashima borra la sonris de su cara y se rasca la nuca, incómodo. Recordar lo que pasó con su primo no debe ser muy agradable, a mí tampoco me gusta recordar lo que pasó con Ryu ese día. Casi lo pierdo por ser un idiota y no valorar lo buena persona que es.

—Yo... pedí explicaciones a Kyosuke, no entendía cómo él podía hacerme eso, somos familia, la familia no se traiciona de esa forma. Estaba molesto, pero sobretodo triste, además acababa de confirmar que a Toono le gustaba él y eso me dolió—

—¿Y qué pasó?—

—Kyosuke se puso a llorar y Toono me dijo que estaba siendo demasiado cruel, pero eso no era cierto, yo nunca sería cruel con mi primo, ni siquiera cuando él intentaba arrebatarme al chico que me gusta tanto. Me puse furioso y me confesé de nuevo, gritándole y también dije que ninguno era justo conmigo, porque Toono, a pesar de no querer estar conmigo románticamente, siempre me buscaba y a veces se molestaba si me veía con otras personas; y Kyosuke, mi familia, mi sangre, quería destrozarme. No es justo, sigo pensándolo, yo nunca les hice daño a ninguno, yo... solo quiero ver a la gente que amo feliz, así que les dije que me rendía, que estuviesen  juntos o hicieran lo que quisieran, pero que yo necesitaba alejarme una temporada porque no podía más. Lloré muchísimo, fue humillante—

—Tendrías que haber venido a hablar conmigo, no tenías porqué pasar por eso solo—lo regaña Ryu

—Pero tú y Tamura habías discutido también y, sinceramente, creo que vuestra riña fue más fuerte y no era justo que yo fuera a ti para que me consueles cuando tú estabas mal, senpai—

—Pase lo que pase, soy el mayor, mi deber como senpai es estar ahí cuando mis kohais me necesitan—

—No solo Ryu—empiezo a hablar—También puedes contar conmigo, sois mis kohais también—

—Muchas gracias—sonríe— pero ya no importa, estuve unos días lejos de ambos y al final se acercaron a disculparse conmigo. Seguía estando triste, pero no quería ser egoísta con ellos. Le pregunté a Toono si, con el tiempo, podría llegar a gustarle y me dijo que no lo sabía, que nunca había gustado de un hombre—

—Vaya—

—Eso me molestó un poco, porque Kyosuke sí le había gustado. Me lo tomé como algo personal y le dije que si no le gustaba podía decírmelo, porque prefiero ser rechazado que vivir con la incertidumbre—

—Bien hecho—

—Me respondió que no era por mí, pero no lo creí. Decidí ser más frío con él, porque tenía que hacer que mis sentimientos desaparecieran o nunca podría avanzar. Para ser su amigo, primero tenía que dejar de amarlo y desearlo—

—¿Y qué pasó?—pregunto

—Un día vino a mi habitación y me besó, estaba llorando porque no quería que me apartara de él. Me sentí muy bien , quería hacerle el amor ahí mismo pero... no quería asustarlo. Desde entonces somos un poco más cercanos, a veces nos besamos, pero no he ido más allá, no quiero obligarlo a algo que no quiera hacer—

—Definitivamente, eres un buen chico—le digo

Me sorprende que alguien pueda ser tan bueno y amable y también que, a pesar de ser tan bueno, la vida lo trate tan mal. No es nada justo.

—Yo creo que Toono y tú vais a estar juntos en un futuro próximo—añade Ryu, sonriéndole  con afecto

—Eso espero, senpai—asiente Kashima

El resto de la mañana lo pasamos hablando de cosas de clase, Kashima es brillante, entiende todo fácilmente y muy rápido, siento envidia, yo soy más lento. Tampoco me puedo quejar mucho, mis notas no son lamentables.  A la hora de la comida comemos juntos en la cafetería, Toono, Yuri y Jimmy se nos unen. Pillo a Toono mirándo a Kashima cuando piensa que nadie se va a dar cuenta, sí siente algo por él, es obvio por como lo mira ahora.

Me temo que dentro de un tiempo el club de fotografía va a desaparecer, todos estamos encontrando a nuestras almas gemelas. Yuri tiene a Jimmy, Kashima a Toono, yo tengo a Ryu y estoy seguro que de que Itome acabará molestándose por compartir a Akemi y algo grave pasará. Espero que Shikatani también encuentre a alguien.