Huérfanos

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Caminaba por un lugar oscuro, así lo veía él. Entraba luz por medio de unas grandes ventanas pero a pesar de ello se seguía viendo oscuro

Vio una puerta frente a él, unos pasos más y llegaba. Al llegar :v fue agarrado de los hombros volteó su vista hacia arriba encontrándose con unos ojos negros

— No te preocupes, son niños buenos —. La joven monja le dedicó una hermosa sonrisa luego se paró y abrió la puerta

Sus ojos azules divisaron aun grupo de niños sentados jugando algo

— Él es kageyama y se unió hoy, por favor sean amables—. Pidió con una enorme sonrisa

—¡¡Hola!!—. Un niño de cabellos naranja se acercó y le extendió su mano — ¡Soy Hinata!—. Exclamó feliz

— ¡Oh! ¡¿Quieres jugar con nosotros?!—. Pregunto  un niño de cabellos negros como él, pero tenía un fleco :v

— Ven acá—. Un castaño lo jalo

—¡¡Nosotros nos encargaremos de él shimizu nee-san!!—. Gritaron felices

Él de ojos azules se sentía algo avergonzado, no sabía qué hacer o qué decir, cómo actuar o algo

Estaba en un lugar extraño, sus padres no estaban y de pronto apareció en ese lugar. Estaba confundido, niños le hablaban pero no sabía que hacer

— ¿Y bien, jugamos?—. Él castaño junto al de cabellos negros sonreían de una manera espeluznante para él recién llegado

—¿D-de...de... qué?—. Pregunto asustado y tímido, tragó saliva y fue empujado, por el esta acción cayó a un cojín que se estaba allí

— Te enseñaremos—. Él joven de cabellos naranja le bajo su pantalón y luego con sus manos le agarró su miembro :'3

—¡¡Ah-anh! ¿Qué...qué haces?—. Pregunto

— No te preocupes, tú tranquilo sabemos que hacer—. Comento orgullos el de cabellos castaños — Abre la boca—. Le ordenó, agarró el rostro del menor y lo hizo voltear a verle — Vamos, hazlo abre tu boca—. Sonreía

Tobio tragó grueso, acato las órdenes y al abrir su bella y pequeña jeta :v le metieron algo en ella

—¡Mmmm!—. Sintió unas manos que jalaron su ropa, y él chico de cabellos naranja estaba sobre él

— Ya esta—. Dijo lamiendo sus labios — Ya no serás virgen—. Le comento para luego dejarse caer sobre el miembro del pequeño de ojos azules

Este abrió sus ojos en sorpresa ¿¡Qué demonios pasaba!?

— Vamos, así no se hace—. Dijo él castaño — Te enseñaré, por cierto chibi-chan ¿Te gusta?

—¡S-si! Se siente bien—. Respondió cabalgando encima del azabache menor — ¿Te sientes bien kageyama?—. Pregunto — Yo me siento bien, con tres dedos es suficiente kuroo-san—. Volteó hacia atrás para ver al nombrado, quien sacaba dos de sus dedos de su boca

— Muy bien, yo también quiero sentir placer

—¡¡Huhg!!—. No podía hablar ya que su boca estaba ocupada, se estremeció al sentir dos dedos en su interior era raro, y dolía un poco. Por alguna razón por donde orinaba :v se sentía bien, ese enano, estaba dentro de él. Era la primera vez que hacia ese tipo de cosas, nunca se imaginó hacerlo. Habían veces en donde lo veía, veía a sus padres hacer ese tipo de cosas

Su madre encima diciendo que moriría :v de tanto hacerlo, que era como tocar el cielo ¿Pero qué de especial tiene tocar el cielo? Solo son nubes y ya, pero era inocente no sabía nada

A penas tenía diez años, bueno aún le faltan unos meses, pero sigue siendo un niño

— Muy bien, ya esta—. Dijo tetsuro agarrando su miembro y lamio su labio, se podía ver un brillo en sus ojos — Ahí voy—. Hablo juguetón

Kageyama tembló al sentir algo grueso y grande dentro suyo, no eran dedos, era algo más grande y grueso, le costó respirar, sus mejillas se tornaron de un rojo tomate intenso, él castaño lo agarró de la cabeza y lo golpeaba contra su miembro, él de cabellos naranja aún no paraba de brincar sobre él. Y él otro azabache lo estaba penetrando

Todo le daba vueltas,  de pronto simplemente ya no vio nada

:V

Con lentitud abrió sus ojos, estaba en una cama se levantó y miro hacia los lados, no había nadie

— Es hora de la cena —. Entro una rubia feliz — Vamos kageyama-kun

—uh, oh—. Se miro y estaba vestido ¿acaso todo fue un sueño?

Pero qué raro, al bajar de la cama se cayó, sus caderas dolían. Frunció los labios, enfrentaría a esos malditos desgraciados

— Al fin despiertas—. La nee-san le sonrió — Por favor sientate—. Le pidió

Kageyama los miro habían rostros nuevos, como por ejemplo un rubio de lentes, un peliverde con pecas, un chico pudin, uno que parecía rábano y otro que se parecía al pudin y lo estaba cerca del rábano

Los miro mal, estaba enojado, se sentó algo alejado. Se vengativa de ellos duda no había, sus ojos brillaron al ver el plato justo en sus manos era curry de cerdo con un huevo encima, su favorito

— Supe que jugaste con los demas—. Subió su vista encontrándose con el rubio de lentes — Juega conmigo tambien—. Dijo quitándose sus lentes

— Tsukki ju-juguemos—. Pidió el pecoso

—¡Yamaguchi juega con nosotros!—. Él de cabellos naranja le exclamó feliz

— No, lo haré —. Respondió tobio

—¿Porqué?—. Pregunto él rubio

— Porque,....porque no

— Solo un rato

— Yo también me unire —. Llegó kuroo sonriendo feliz

Tobio por alguna razón extraña se avergonzó y sonrojó

Finish

:V

Chaou

One shots kurokageDonde viven las historias. Descúbrelo ahora