Cuervo Rojo, Un Asesino Bendecido Por Una Diosa

Capítulo 4: Monstruos

[WOOOOORRRR]

[SKREEEK]

[CRIIIEEEEEUUUUU]

[Deteniendo intrusos]

Las criaturas comenzaron a llegar a la puerta y los guardias rápidamente fueron a combatirlas, eran rápidos, fuertes y estaban coordinados, sus habilidades de combate eran superiores a las de cualquier asesino experimentado.

[GRUUUUAAAAAAGGK]

[CRIIIEEEOOOO]

'Impresionante, no les permiten avanzar ni un paso'

Los guardias peleaban en extremos opuestos atrayendo a las criaturas hacia el centro, entonces el guardia con la cabeza de toro golpeó el suelo con su puño y la tierra se abrió dejando caer a las criaturas hacia el abismo, luego levantó su puño y el suelo simplemente volvió a estar como antes.

'Así que eso quería decir Tricki con "superior a la lógica y a la realidad", eso es la " magia ".

[WEEEEAAAAAARRRG]

[INCINERAR!]

La cabeza derecha del otro guardia habló y luego la izquierda escupió una ola de fuego que redujo a varias docenas de criaturas a solo cenizas, continuaron arrasando con las criaturas hasta que estás cesaron su ofensiva descontrolada.

[N-NO VA-VAN A MA-MATAR-ME]

[SER FUERTES, SER DELICIOSOS]

Con las criaturas más débiles prácticamente exterminadas solo quedaban las más fuertes, esperaron en la retaguardia mientras los guardias peleaban con las demás, estas lucían más fuertes y tenían algo de intelecto.

[Intrusos....deben morir]

[NO]

[HABRÁ]

[COMPASIÓN]

Los guardias y las criaturas tuvieron una especie de diálogo entre ellos y luego se dispusieron a pelear, en eso la enorme puerta finalmente se abrió por completo y varias figuras con grilletes iguales a los de los guardias salieron a apoyarlos, ninguno era humano, solo criaturas en su mayoría humanoides ninguna con rasgos iguales a la de otra.

[Reagrupense y corten su avance al flanco izquierdo, los de soporte tomen los costados y mantenganse cubiertos, los de la fuerza de choque carguen y la infantería mantenganlos a raya]

Su líder era un híbrido entre hombre y ave, tenía alas rojas magníficas en su espalda y un plumaje rojo y blanco que cubría sus brazos y su rostro hasta las patillas, ordenaba y movía a los demás con gran habilidad táctica, era obvio que era un soldado que peleó en incontables batallas.

'Ahora es mi turno de mover'

Grix pasó justo sobre la cabeza de los guardias mientras estos estaban ocupados con las criaturas, nadie pudo verlo y el combate continuó en el exterior, mientras tanto en el interior de la base.

[Señor las criaturas están empezando a coordinarse, deberíamos liberar a los demás sujetos para que ayuden en la primera línea]

[NO....DEBEMOS ESPERAR....]

[Esperar señor?]

[ESPERAR POR QUIEN ORQUESTÓ ESTO....DEBERÍA LLEGAR PRONTO....]

[Como es eso posible!?, ningún detector se activó y ningún equipo de seguridad ha detectado ningún movimiento tras la puerta, esta seguro de que....]

[LLEGARÁ....PREPAREN MIS MARIONETAS....]

[E-enseguida señor]

La misteriosa figura encapuchada abandonó la sala de seguridad y se dirigió a la entrada principal, se movía como si estuviese flotando sobre el suelo y no se podía ver nada más que oscuridad adentro de su capucha, su aura era desagradable y una sensación de ansiedad y terror invadía a quien tuviese cerca, se dirigía a encontrarse con Grix.