El esbelto chico de cabellera azul se encontraba en su cuarto, acostado mientras veía sus redes sociales. Hace cuatro días había ido a mostrar sus poderes a una compañía que buscaba a Alfas, Omegas y Betas que poseían de algún poder sobrenatural. Y obviamente quedó contratado porque, ¿Quién podría rechazarlo?.
Ya demasiado sumido en sus pensamientos, el pitido de su celular lo sacó de su trance, dándose cuenta que era un mensaje de aquella compañía.
Compañíascenery Buenas tardes tenga usted. Al haber sido elegido para formar parte de un equipo de dos, se le otorga vivir de ahora en adelante en una mansión junto con su compañero Alfa. La dirección es esta ☑. Lo esperamos más tardar a las 4pm. Gracias.
TaeHyung sonrió, realmente unirse a una compañía que buscaba personas que tenían poderes era su sueño desde que descubrió a sus 12 años que controlaba el agua. Al principio fue extraño que pensó que estaba alucinando, pero al hablarle a sus padres sobre esto, se dieron cuenta que TaeHyung era un Omega especial. Pero a pesar de eso, TaeHyung estaba un poco en desacuerdo con tener que pasarla encerrado junto a un Alfa. Y peor si se trataba de ese Alfa molesto.
Compañía Scenery
Mm, tengo una pequeña duda.
Dígame.
Bueno, es que mi compañero es un Alfa y yo soy un Omega.. ¿Si saben que estar juntos es un problema?
¡Oh, no te preocupes! La compañía además de la mansión les otorga condones, supresores, juguetes sexuales, entre otras cosas. También se podrían ayudar en sus celos, ¡Es una ventaja! Hasta luego.
Espera, ¿¡Qué!?
Última conexión hace 1 minuto.
TaeHyung frunció su ceño, ¿En serio le habían dicho eso? ¡Imposible! Ahí su virginidad corría riesgo y su celo no estaba lejos de llegar. Si ese idiota lo intentaba tocar lo ahogaría, después lo revive para electrocutarlo y lo manda a volar.
Volvió a regresar todos los mensajes, mirando la dirección, después de tomar su maleta que ya se encontraba lista, tomó sus productos para limpieza, su teléfono, laptop y tomó todo el dinero ahorrado que por cierto era bastante, aunque no lo iba a necesitar, sus padres le mandaban dinero.
Al cerrar la puerta de su departamento, tomó un taxi que lo llevaría a tal dirección.
Al llegar, se encontró con la sorpresa de que el chico menstruación ya estaba ahí.
—Oh, mira quién ha llegado, el chico cabeza de algodón.— TaeHyung lo ignoró, pasando la llave y entrando, mirando sorprendido a su alrededor.
—Wow..
—Lindo pero no es algo que no haya visto alguna vez.
—Estúpido.— Susurró. Ambos subieron las escaleras con maletas en mano, encontrando sus habitaciones.
Al salir, se encontraron ambos en la sala, mirándose a los ojos unos segundos, callados. Como si ninguno de los dos quisiera hablar con el otro.
—Bueno, aquí habrá reglas.
—¿Las harás tú? ¿Qué tipo de reglas puedes poner?, "Hacer ejercicio todos los días".— Jungkook sonrió y se acercó al menor, acorralando a éste en una de las paredes.—Te advierto que si tratas de tocarme te voy a-
—¿Lo dices por mis músculos? Tal vez si esté muy bien dotado pero eso no es tanto por el ejercicio, en realidad es más por mis poderes.— Se separó del sonrojado chico.
—Si bueno, no te pregunté.
—Solo no te enojes porque me lanzas rayos.
—Estúpido, se nota que eres la menstruación que tortura todos los meses de las chicas.
—Tranquilo, algodón de azúcar. Pensé que al menos por eso serías dulce.— Jungkook rió al mirar la expresión molesta del menor.
—¡Ash! Habrán reglas y quiero que las respetes. Primera, no molestarme cuando estoy ocupado, ni mucho menos molestarme por si viene mi novio a casa-
—¿Novio?
—Si. Tampoco usar tus poderes en mi contra ni yo usaré los míos.
—¿Tú qué me podrías hacer?— Rió Jungkook.
—Te mandaré a volar de aquí.
—Inténtalo.— TaeHyung sonrió. De pronto sus pies despegaron del suelo, dando un par de vueltas antes de acercarse al pelirrojo y tomándolo de la mano, tratando de levantarlo bruscamente, más sólo consiguió levantar el brazo del mayor, quedando estancado. Jungkook sonrió.
—¿Qué-
—¿Recuerdas cuáles son mis poderes?
—¿Lanzar sangre podrida?— El mayor rió de nuevo.
—Baja.— TaeHyung confundido volvió a poner sus pies en el suelo.
—Tus poderes son el fuego, ¿no?
—Si, pero hay más.— TaeHyung se quedó en silencio, tratando de memorizar. Gimió del susto cuando Jungkook tomó uno de los sillones de la sala, alzándolo con una sola mano.
—¡Por dios!— Jungkook volvió a dejar cuidadosamente el sillón en su lugar, mirando a TaeHyung sin expresión.—E-eso..
—No hablemos mucho de eso. ¿Cuáles son las otras reglas? Tengo sueño.
—A-ah.. cuando entremos en celo no debemos salir de nuestros cuartos y si lo hacemos debemos tomar supresores.
—¿Hacer qué?
—Dios, eres un idiota.— Jungkook rió a carcajadas. Era divertido molestar al menor.
—Okey, lo siento.— Paró.
—Cuando yo entre en celo, no quiero que te acerques para nada, me quedaré en mi cuarto, tú en el tuyo y felices para siempre. Adiós.
—Iré a tomar agua.
—Cuidado con no apagar el fuego que llevas adentro.— Gritó TaeHyung subiendo las escaleras.
—Mejor apágamelo tú.— Gritó.
TaeHyung con ayuda de su mente, atrajo un vaso hacia él, tomándolo entre sus manos y con ayuda de sus poderes llenando el vaso de agua, luego voló hacia el pelirrojo y le lanzó el agua en la cabeza.
—Ahí está, ya te apagué "el fuego".
—¡Oye!
—Buenas noches, menstruación. Recuerda no molestar mucho a las chicas el día de mañana.— Jungkook bufó molesto, TaeHyung sonrió y se metió a su recámara, cerrando con seguro. Cuando estuvo dentro, se recargó en la puerta, temblando y respirando entrecortadamente.—¿Po-por qué empecé a lubricar cuando lo miré?..
JAJAJAJAJA tremenda mierda.
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