Un rubio se despertaba en la mañana temprano, tenía que ir al ministerio, lo habían citado el ministro ya que según él tenía algo muy importante que tenía que comunicarle.
Se levantó estirándose, observando a la persona que estaba dormida a su costado. Era una mujer rubia, la sábana que la cubría estaba enrollada en sus caderas, estaba acostada boca abajo dejando su espalda descubierta. Era hermosa, aunque lo que tenía de hermosa lo tenía de hueca.
Había pasado una gran noche con ella pero no volvería a repetir, demasiado ruidosa para su gusto.
Se levantó de la cama y tomó sus cosas vistiéndose rápidamente; desapareciendo del lugar para aparecer en la mansión.
Se dirigió a su habitación y tomó se fui una ducha rápida, se vistió con su impoluto traje negro. Volviendo a desaparecer rumbo al ministerio.
Caminaba erguido y elegante por los corredores del gran edificio. Las mujeres se le quedaban viendo embobadas, con 23 años Draco Malfoy aparte de ser uno de los hombres más ricos de Londres, y no solo de Londres mágico;ya que el heredero Malfoy había extendido sus empresas hasta el Londres Muggle, es uno de los hombres más guapos y codiciados por el sector femenino.
A pesar de que había recibido muchas propuestas de diferentes mujeres, Draco Malfoy no había asentado cabeza, no había conocido a ninguna mujer que llamara lo suficiente su atención para quedarse interesado en ella.
Llegó a su piso correspondiente, el departamento de misterios. Draco Malfoy era un inefable. Aunque dirigía las empresas Malfoy, el cargo de inefable siempre le interesó.
Algo que le gustaba de su trabajo era la discreción. La limitación clave de un inefable es que no se puede hablar de su trabajo.
Un inefable tiene diferentes cargos. Algunos pueden estudiar el amor en la Cámara del Amor, la cual, según Albus Dumbledore, se mantiene cerrada en todo momento; o el concepto del tiempo en la Cámara del Tiempo, donde el Ministerio tenía almacenadas las existencias de Giratiempos antes de su destrucción durante la Batalla del Departamento de Misterios; otros pueden explorar la naturaleza de los pensamientos en la Sala de Cerebros, o de la muerte en la Cámara de la Muerte, donde se haya un velo que actúa como puerta en un solo sentido.
A Draco le encantaba su trabajo, él investigaba distintas causas de muertes, más que todo cuando la muerte tenía que ver con Magia negra y criaturas oscuras.
Al entrar en su despacho, vio que ya se encontraba allí la jefa del departamento de misterios.
Levina Monkstanley era una mujer joven, para ser Jefa del departamento de misterios donde el cargo siempre había sido de hombres mayores. Tenía unos 30 años por lo que sabía, alta, piel tostada, cabello negro como la noche y ojos azules. Draco tenía que admitir que era una mujer hermosa, en alguna ocasión tuvieron un breve coqueteo pero eso lo dejaron de lado por temas laborales.
—Malfoy te estaba esperando, hay un caso y es de suma urgencia.
—¿Qué sucede?— dije sentándome en la silla de mi escritorio.
—Un asesinato. Chico joven, fue encontrado en el callejón Knockturn. Grandes rastros de Magia negra se encontraron en la escena.
—¿Algún testigo? ¿Sospechoso?
—Nada, parece que nadie vio nada. Ni dejaron algún rastro que pudiera inculpar a alguien. Acá lo que dejo impactado a los aurores fue que el cuerpo no tenía sangre. Estaba desangrado
—¿Desangrado? ¿Y que sucedió con la sangre?
—No se sabe, no hay rastros de esta. Lo único que se encontró en el cuerpo fueron dos pequeños agujeros en el cuello.
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Oscura Seducción [PAUSADA]
VampireLa guerra terminó y por fin en el mundo mágico reina la Paz, todos intentan volver a como era antes; pero ya nada será igual. Una serie de acontecimientos comienzas a ocurrir, peligrando con la tan buscada tranquilidad del mundo mágico. Draco Malfoy...