Un diario.

8

“Me di cuenta que lo que las personas llaman “amistad” es otra palabra mas para traición”
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—Tu ganas.—susurro a la nada, aún sentado en el suelo, con la cara escondida entre sus rodillas.

Ya no sabía ni que sentir, dentro suyo había una vorágine de rabia, rencor, ira, dolor, tristeza, remordimiento, arrepentimiento, había tanto dentro de él, que sentía que explotaría. Diez años de amor no correspondido terminaban finalmente ahí, diez años de falsa esperanza morían ese día, y joder… se sentía del asco.

Sentía un molesto nudo atorado en su garganta, quería gritar, golpear algo, destruir algo, quería llenar ese hueco que había dentro suyo con algo.

—Sasuke…—y entonces lo escucho la voz del culpable de su actual situación, la voz de esa persona que por más que quería no podía odiar, la voz de esa persona que sabía había visto.

Ni siquiera levantó su rostro, permaneció en la misma posición en la que estaba, escuchando nada más sus suaves y temerosos pasos acercándose a él, hasta finalmente tomar asiento en ese desolado pasillo.

—Una disculpa jamás sería suficiente… ¿Cierto?.—susurro nervioso y él tuvo el impulso de querer reírse.

¿Una disculpa? No, gracias, ya había recibido muchas ese día.

—No fue a propósito, lo sabes ¿verdad?. Yo nunca quise enamorarme de ella, nunca quise….

—Sabes Naruto, en este momento quiero romperte la cara.—susurro, levantando un poco la mirada y observando aquellos ojos azules que brillaban en una mezcla de culpa y tristeza.

Una extraña y tensa sonrisa se pintó sobre aquel rostro.—Lo merecería.

Él suspiro y apartó su mirada.

—“Está bien, no importa mientras ustedes estén felices”, no diré esa mentira. Si te soy sincero espero que fracases, espero que ella te rompa el corazón y sientas un poco de lo que estoy sintiendo.—confeso y por extraño que sonará, Naruto solo sonrió un poco menos tenso.

—Espero que lo arruines a lo grande.

—Yo espero que te vuelvas a enamorar y está vez si seas correspondido.

—Probablemente no sea fácil.—susurro sin mirarlo.

—Lo sé.

—Quizás me vaya de Japón.

—….Es entendible.

—Probablemente jamás te perdone.
—Lo entendería.

—Me arrebataste a mi primer amor, a mi futura esposa. Te odio por eso.—susurro mientras el nudo en su garganta permanecía ahí, molesto, fastidioso e incómodo.

—Lo siento.

—Sabes, yo realmente la amo, no sé en qué momento esos sentimientos por ella aparecieron, solo sé que un día ya estaban ahí. Sé que ella salía contigo a escondidas.—susurro prestando especial atención a Naruto, viendo el momento en el que todo su cuerpo se tenso y bajo su rostro con culpa.—Lo dejé pasar porque pensé que no importaba cuanto tú lo intentarás, al final ella terminaría siendo mi esposa. No planeé ser el villano, nunca pretendí entrometerme entre tú y ella, solo estaba esperando, aunque me quemaran los celos, aunque cada vez que los viera sintiera dolor, seguía esperando pacientemente que ella me escogiera a mí.

»Pero al final, ella no me escogió, al final terminé perdiendo, perdí a mi mejor amigo y a la chica de la que estoy enamorado.—susurro con voz vacía, ya estaba cansado, ya no quería seguir sintiendo nada, quería interruptor que apagará todo dentro de él.—La cosas jamás volverán a ser igual, no soy una persona madura, ni mucho menos condescendiente, soy egoísta, y rencoroso; así que no esperes buenos deseos de mi parte, porque estaré esperando a que fracases. Lo siento, este es el tipo de persona que soy.—susurro empezando a levantarse mientras un suspiro cansado borraba de sus labios.

Naruto imitó su acción mirándolo con infinita culpa.

—Si te sirve de algo, yo realmente lo siento.

—Límpiate el trasero con tu “Lo siento”… dobe.

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Supongo que es el fin.