LIFE[YOONMIN]

One.

Sentí como si me hubieran tirado un balde de agua helada sobre mi,mis piernas me fallaron haciendo que calera de rodillas en el suelo aún procesando la información que me acababan de decir.
-Lamento su perdida Sr. Park-Fue lo que dijo el doctor mientras me ayudaba a levantarme para sentarme en uno de los asientos de la sala de espera.
-Es una broma, ¿cierto?, muy buena broma Jimin ya sal de donde estés - Dije mientras volteaba a todos lados en busca de el.
-Sr. Park entiendo que esto es muy duro para usted y aun tiene que asimilarl... -no lo deje continuar ya que empecé a gritar
-CALLESE, dígame donde esta jimin! -
Me separe de aquel doctor para correr entre los pasillos de el hospital mientras el olor a muerte y cloro invadía mis fosas nazales
-JIMIN, JIMIN DONDE ESTAS? -Empecé a gritar y abrir todas las puertas que me encontraba hasta que lo vi, a él, a aquel niño del cual me enamore perdidamente desde el primer momento en que lo vi,aquella sonrisa que hacía que sus ojos desaparecieran ahora no la vería más, se había ido.
-¿Jimin? - La voz no me salía.
Estalle en llanto en ese momento, mientras corrí hacia el para abrazar su cuerpo sin vida, pálido sin ninguna facción en su rostro. Sentí unos brazos que me tomaban por la cintura y me separaban de él, es lo último que recuerdo desdes de que todo se volviera oscuro.

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Ahora me encuentro frente a el ataud donde descansa Jimin, el amor de mi vida. Su cuerpo se veía totalmente diferente a como lucia hace unos días, sus mejillas normalmente sonrojadas por su sonrisa estaban totalmente pálidas, sus ojos estaban cerrados tal cual como si estuviera dormido, solo que esta vez no despertaria, sus labios no estaban rosados e hidratados como siempre, ahora estaban sin color, sin vida y partidos.
La sala de la funeraria era un mar de lágrimas, de hecho no sólo la funeraria si no todo el país, todo el mundo. Park Jimin, acababa de morir, el amor de mi vida acababa de morir.
Senti unos brazos sobre mis hombros y ahí se encontraba la madre de Jimin con los ojos llorosos y claramente el corazón roto.
-Tenemos que ser fuertes hijo, tenemos que seguir adelante amor-Dicho esto me abrazo para comenzar a llorar.
A mi las lágrimas no me salían, llore día y noche hasta quedar seco, solamente estaba ahí parado con una foto de Jimin, mi Jimin,sobre mis brazos.
Cerraron el ataud para subirlo a la camioneta para llevarlo al panteón, al salir de ahí se encontraban paparatzis tomando miles de fotografías haciendo que el flash de las cámaras me segara por un instante.
Estaban cientos de personas ahí llorando, gritando con velas, fotos o sus Army Bomb en las manos,algunas con carteles o fotografías.
-Suga, Yoongi, no estas solo, esto es tu culpa-
Eran algunas de las muchas cosas que gritaban, unas bonitas y algunas no tanto, es irónico que cuando anunciamos nuestra relación lo único que nos daban era odio y ahora están aquí, hipócritas.
Estaba muy ocupado con mis pensamientos que no note cuando ya nos encontrábamos en el panteón donde todos lloraban a mares,incluyéndome, ahí fue cuando recordé todas esas cosas que pasamos juntos.

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-Yoongi... - Note rápidamente que estaba nervioso por sus mejillas rojas y por que jugaba con sus manos.
-Mmh? -
-Es que te tengo que decir algo-
-Pues dilo-En realidad no le tomaba mucha importancia, siempre hacia esto para molestarme.
-Es que creo que me gustas-En ese momento me levante para tomarlo entre mis brazos y darle un beso en sus labios.
-Tu a mi me encantas, Jiminie-

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-JIMIN, ¿DONDE ESTA MI HELADO?-
Entre a la habitación para verlo tranquilamente acostado en mi cama con Mi helado en sus manos.
-Jin me dijo que podía comer un poco -
-PEQUEÑO DEMONIO, VEN AQUI-
Y así comenzamos una persecución en mi habitación para después tirarnos a la cama para besarnos.

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-¿Quieres un postre, Amor?
-Nah, ya vámonos -
-Oh... Pues yo si quiero uno-levanto su mano para que viniera el mesero mientras yo voltee a ver la vista que teníamos era más que hermosa, estábamos en uno de los mejores, regrese mi vista a la mesa cuando pusieron un plato en la mesa de mi postre favorito con una cajita que tenía un anillo con una joya en forma de corazón dentro de esta
-Cariño... -
-Min, después de todos estos años juntos me harías el honor de permitirme pasar el resto de mi vida a  tu lado? - Ahora se encontraba arrodillado frente a mi con esa caja entre sus manos.
Estaba en Shok, lo único que pude hacer fue asentir mientras sonreía como nunca.

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Ahora todo esos eran recuerdos, nunca más lo iba a ver, a él, al amor de mi vida.Lo único que quedaba era aquel anillo con una joya de corazón que decoraba mi mano.
Recordé todo esto para después ver como metían a quella caja que llevaba el cuerpo sin vida del amor de mi vida en ese hoyo en la tierra.
Caí sobre mis rodillas para comenzar a llorar nuevamente, Taehyung me levanto y me abrazo para seguir llorando sobre el.

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Ahora me encuentro en la casa donde vivía con Jimin, empecé a ver todos los álbumes de fotos que teníamos juntos, aquellas aventuras...
Recordando más y más momentos juntos y sin darme cuenta comenzar a mojar mis mejillas con las lágrimas que salían nuevamente de mis ojos.
-No puedo, no puedo hacer esto, no sin ti-
Fui a mi mesa de noche donde tenía aquellas pastillas para dormir en mis noches de insomnio, que está vez no serían para eso.
Fui con una botella de vino y comencé a tomarme la toda, por cada trago que daba me tomaba una pastilla hasta terminar con todas las pastillas de el frasco.
Me recosté en la cama como pude,ya no me sentía bien, pero eso era lo que quería, quería morir para estar con él.
Poco a poco fui cerrando los ojos para quedar en un sueño del cual nunca despertaría.
-Nos vemos pronto, amor de mi vida-

FIN.