Where do broken hearts go?

Capitulo 4

Mire por la ventana tratando de averiguar en donde estabamos, pero extrañamente, no sabia donde me encontraba.

-¿Vamos?.- preguntó con su sonrisa de siempre.

-¿Dónde estamos?-

-Es una sorpresa, bonita- contestó guiñandome su ojo derecho.

Dió la vuelta al auto para abrir mi puerta, luego de hacerlo me ayudó a bajar. Miré a mi alrededor y me encontré con algo que realmente, no esperaba.

-¿Te gusta?- Preguntó señalando el hermoso parque de diversiones frente a nosotros.

En respuesta asenti con la cabeza, sonriendo.

- Tengo las mejores ideas para salir con una chica- Afirmó mordiendo su labio inferior.

Rodé los ojos y le pegue en el brazo, en forma de burla.

Él me tomó del brazo y me arrastró hacia una atracción.

Mi cabeza debatía por si debería dejarme tratar de esta manera o no. Era tan... imponente, e iba en contra de mi voluntad.

Se detuvo en frente de un tiro al blanco. Sonreí. No parecía de 20 años, parecía un pequeño haciendose el tonto.

-Bueno, en las películas funciona- Dijo acomodando su pelo. Alcé las cejas sorprendida- Voy a ganar un osito y vas a besarme. De lo contrario las peliculas mienten. ¿No?.

- Creo que vas a descepcionarte querido-

Negó con la cabeza y le pagó al tipo del juego. Tenía cinco pelotitas y tenía que derribar una piramide de botellas de plastico. Pero erró los cinco tiros.

-Mierda- Dijo al mismo tiempo que yo me reía de su mala puntería.- No voy a rendirme- Aseguró pagandole de nuevo al tipo, el cual contó los billetes sonriendo y le dió cinco pelotitas más.

Erró los primeros cuatro tiros, pero en el segundo logró derribar la pirámide.

- SI- Gritó emocionado- SI, SI, SIII- Se acercó a mi y me abrazo levantandome en el aire.- Quiero ese-dijo señalando un Koala peludo.

El tipo le dió a Harry su premio y él se acercó a mi con una sonrisa. Me dió al peluche sonriendo seductoramente.

-Quiero mi beso a cambio- Dijo aun con esa sonrisa tan.. tan... Harry

- Lo siento, no puedo. Es un Koala, no un osito, va encontra de las películas.- dije riendo mientras me miraba enojado.

-¡Ey! Quiero mis veinte dolares de nuevo. -Dijo con puchero.

Negué y caminé con él detrás mio hasta una montaña rusa.

Luego de subir y abrocharnos el cinturón Harry miraba hacia todos lados con cara de terror.

-Harry,¿Estas bien?-

-Si, solo... solo ... me dan miedo las alturas- Contestó pálido como un papel.

-Podemos bajar si queres.-

-No, esta bien- Dijo agarrandome fuerte de la mano y acercandose a mi.

Cuando bajamos tenía una sonrisa, y aun no soltaba mi mano.

-Estuvo genial. Vamos a subir de nuevo- dijo arrastrandome otra vez.

Subimos otras tres veces a esa montaña rusa.

Después de la cuarta vez en la atracción, se paró en frente mio mirandome a los ojos fijamente, mientras yo pensaba que iba a perder el sentido.

- ¿Vamos a comer bonita? - Pregunto rozando mi mejilla suavemente con sus labios.

Asenti y caminamos hasta un pequeño restaurante cerca del parque. Nos sentamos en las mesas de afuera y ordenamos. No podía creer donde me encontraba. Es decir, nunca imagine salir con este tipo de chico. Y nunca crei que iba a divertirme tanto.