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«🦋»
Allí me encontraba de nuevo, siendo completamente poseída por la lujuria, mientras que mi mente y mis ojos se nublaban a causa de las increíbles cantidades de placer que me eran brindadas por ella. Fue en aquel momento cuando sentí todo mi cuerpo tensionarse, para segundos después sentir cómo una sensación de euforia y serenidad total se apoderaban de mí, mientras que mi mirada se encontraba con aquellos oscuros ojos que tanto me volvían loca.
Caí completamente rendida, mientras que mi respiración, aún agitada, comenzaba a regularse poco a poco y mis ojos se cerraban lentamente.
Sin quererlo yo o tan siquiera planteármelo, aquel sentimiento que tanto deseaba olvidar en aquel momento; las palabras que menos quería que salieran de mi boca, fueron pronunciadas por mis labios involuntariamente.
"Te amo..."
Y luego de aquello, dejé que mis párpados se cerraran por completo, cayendo en un profundo sueño. Lo último que sentí fue a ella, cubriéndome con sus sábanas cuidadosamente.
Habían pasado un poco más de treinta minutos cuando me desperté, mi mirada encontrándose de inmediato con ella, toda su atención dirigida hacia su celular. Una sonrisa adornaba su perfecto rostro.
Tan pronto como vio que había despertado, aquella sonrisa se esfumó inmediatamente. Caminó hacia mí, sentándose en el borde de la cama.
Hice un esfuerzo para levantarme, sintiendo la sábana que me cubría deslizándose por mi cuerpo lentamente.
"Puedes tomar un baño antes de irte."
Sin decir palabra alguna asentí, para luego tomar mi ropa y dirigirme hacia el baño.
Tomé una ducha corta con agua caliente. De verdad la necesitaba para ordenar el desastre que era mi mente en aquel momento. De repente, aquellas palabras vinieron a mi cabeza de nuevo, causando una repentina sensación de vergüenza y arrepentimiento en mi ser.
¿Por qué lo hice...?
Conocí a Son gracias a un trabajo en grupo de la universidad. Siempre me había parecido una persona bastante misteriosa, y me lo pareció incluso aún más después de aquel día; día en el que tuve la oportunidad de mantener una conversación más o menos normal con ella.
Me dijo que no le agradaba la idea de tener relaciones serias, que era un alma libre y que se acostaba con chicas por diversión.
Me dio bastante igual al principio y simplemente seguí pensando que su personalidad era un poco rara. Aquel pensamiento cambió totalmente después de una noche; en la que, sin siquiera saber cómo, terminé acostándome con ella en una de las fiestas que organizaban nuestros compañeros para celebrar el cierre de los exámenes.
Todo pasó muy rápido, y no nos dirigimos palabra alguna después de la fiesta, ni siquiera cuando aún estábamos trabajando juntas en nuestro proyecto.
