Comienzo

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Pensaba que mi estadía en el cosmos era finita, y que este espacio tiempo que comparto con aquellos que me rodean era un papardeo, no soy nada fuera de lo ordinario, llevo una vida plácida y tranquila, que finalmente perecerá como todos, o eso creía, quizá, no era simple polvo de estrella, ponte cómodo, esta es mi historia.

*Ese día en la mañana*
5:00 am bip bip bip
-"Hora de levantarse"- me desperté y pasé la mano por mi pelo, era un desastre, caminé hasta el baño, me ví en el espejo -"no estoy tan mal"-pensé, cerciorándome de que nada estuviera fuera de lugar, hasta que vi un conjunto de estrella en mis ojos.
-...pero, ¡¿Qué carajos!?...- al alejarme, resbalé con una toalla, tuve  miedo e intriga así que al momento de reincorporarme, retorné la mirada al espejo, no vi nada, -"Chale, no más brownies espaciales "-.

Me alisté para salir a la universidad, ya casi terminaba el año, estaba feliz de recibir mi título, en el verano hice un trabajo de investigación en un instituto reconocido a nivel mundial, para mi sorpresa había detectado una colisión de estrellas de neutrones, por primera vez en la historia se combinaron en una misma observación ondas gravitacionales y electromagnéticas. Lo único genial que se me ocurrió decir fue "ah nu ma..., pues fue bastante sencillo", por la misma situación este instituto me pidió una contratación inmediata, nunca creí llegar tan lejos y tan pronto, supongo, corrí con suerte, pues ellos mismo dijeron "tu futuro como astrónoma es prometedor y nos encantaría que alguien tan talentosa se uniera a nosotros". Al momento quise decir que si, pero sabía que debía terminar la carrera, les solicité el tiempo exacto para graduarme y ellos accedieron.

Mi vida iba bastante bien, tenía un trabajo asegurado, una relación que iba progresando, mis amistades son las que necesitaba , ¿Qué más podía pedir?.
Pero, como dicen "cuando sientas que algo va bien, es porque estás olvidando algo..."

*Ese día llegando a la universidad *
Entré a mi salón, todo transcurrió como cualquier otro día "en el universo recién nacido después del Big Bang, las variaciones a escala microscópica actuaron como semillas de las galaxias..."

Terminando las clases me quedaba en el techo de la universidad cada que podía, con un telescopio, una cobija por si hacía frío y la compañía de la luna, aunque algunas veces...
- ¿Por qué tan sola?- una voz rompió el silencio en el que estaba.
Sonreí y lo ví acercarse.
- Yo nunca estoy sola, siempre tengo su compañía-. Señale a aquella en la que muchas miradas se han perdido pidiendo respuestas.
- Tienes razón- dijo acercándose cada vez más, como un zorro cazando a su presa.
- Siempre la tengo , ¿Qué te trae por aquí?- pregunté sabiendo la respuesta.
- Pues nada en particular, solo una mushasha, que se a robado algo valioso de mi, ¿no lo tendrás tu de casualidad?-
- Ya vas a empezar, si te devolví el lápiz que me prestaste hoy en la mañana-  " y así se arruinan los momentos románticos"
Él soltó una pequeña risa , pero pronto retomó su papel
- No, es algo más especial, ¿realmente no lo tienes tú?- ~la presa estaba en la trampa y el zorro lo había conseguido ~
- Si lo tuviera ... me temo que ambos estamos jodidos -. Y por fin me encontré con esos ojos cafés en los que solo mi mirada se encontraba tranquila.

Nos recostamos en aquel techo mirando las constelaciones, yo abrazándole, y él a mí, esta noche habría lluvia de estrellas,no podía perdérmela.

Conforme pasaba la noche, él se quedó dormido, yo tenía una extraña sensación, algo era diferente. Inconscientemente observé una estrella fijamente, levanté mi mano izquierda simulando tocarla, sentí un ardor y después nada, mi mano comenzaba a irradiar hasta que una chispa se hizo presente "si esto es otra ilusión o una broma punk , por favor que pare", espantada me alejé del techo sin hacer tanto alboroto, hasta que de repente cesó. Aliviada , quise regresar con él, pero cuando miré al suelo, estaba fuera del techo , en pleno vacío, flotando "Ay Wey!..." corrí ... o ¿volé?... da igual, lo más rápido que pude hasta llegar a mi moto , estando a salvo en el piso otra vez, arranqué sin mirar atrás , dejando mil dudas y a mi chico, una mano irradiante y recuerdos tratando de surgir...

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