Era un dia lluvioso, grandes nubes de un color gris. Cubrían el hermoso cielo azul una pequeña chica con cabello de un color blanco puro, con unos hermosos ojos color escarlata; corría con lágrimas en sus ojos. Sentía un nudo en su garganta que apretaba,no era capaz de decir palabra alguna las pequeñas gotas de agua caen sobre su cabello. Sus hermosos ojos escarlatas derraman lágrimas, detrás de ella un chico peli castaño con unos hermosos ojos verdes como las aceitunas, la sigue corriendo. La pequeña chica se detiene las gotas de la tormenta están mojando su hermoso cabello blanca. El chico se detiene, su respiración es agitada sus ojos grises detonan ira y frialdad, la pequeña gira sobre sus tobillo y aquellos ojos escarlata y grises se conectan. La chica solo sentía su corazón quebrarse en miles de piezas, aquel chico solo miraba aquella pequeña chica con frialdad y desprecio.
-Retsu por que me has hecho esto, yo te amo pero por qué me miras con tanto desprecio?!- Pregunto la pequeña chica con lagrimas en sus ojos, miraba como el chico solo le daba una sonrisa de ironía.
-Mi pequeña y adorable hoshi me has llegado a mentir y eso para mi es imperdonable, te amaba y te ame mi pequeña niña pero por kami-sama deja de ser tan estupida! Por dios deja de joder y molestar un rato Hoshi- Dice Retsu mirándola con rabia, se sentía bastante molesto con la pequeña chica.
La pequeña chica sentía como su corazón se estrujaba, sus pensamientos comenzaron atormentarla, se giró sobre sus tobillos simplemente tomo sus audífonos limpio las lagrimas de sus ojos.
-Esto ha terminado retsu, solo deseaba que me hubieras amado de la misma manera en que yo lo hice pero a tu parecer solo era una molestia en tu dia a dia me he humillado de la peor forma solo para que tu me siguieras amando.- Dice Hoshi susurrando colocando sus auriculares en sus oídos, sin observa como aquel chico la miraba con frialdad, ella comenzó a caminar. Retsu al mirar como aquella chica que era su pequeña presa se escapaba de él lo molesta de una gran manera. Ademas, el sabia lo que ella había dicho era cierto ella siempre trataba de hacerle feliz a pesar de que ella para él no era más que una molestia y una mocosa malcriada frágil como el cristal. Por su orgullo y su desconfianza perdió a una chica que lo amaba tal como era.