La Lluvia

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Yacía tendido en mi cama, un Jueves oscuro y lluvioso, día perfecto para no hacer nada, como lo hago usualmente, o como dicen que hago, ya que, ¿se puede considerar no hacer nada a estar viviendo en tus pensamientos y reflexiones?
Mi vida es un pequeño bote flotando en un imponente e indomable mar de pensamientos, reflexiones y dudas, tales como qué es lo que hay mas allá de la muerte? Qué somos en él incalculable universo? Puede que simplemente seamos gotas en una inmensa laguna, como decía un gran rapero.
La gente me sorprende constantemente, por lo idiotas que son, finjiendo preparase para un futuro, sin saber si pasaran del hoy, sin caer en que lo que forma parte de su hoy puede en tan solo segundos formar parte de un añorado ayer. Y sin embargo siguen buscando ese placer, carnal y maldito, aunque considerado un paraíso, un lujurioso paraíso, en él que yo tan solo divagó viviendo en mi piso.
Y rebuscó en las heridas del pasado, que me han marcado e imagino un diferente desenlace, hasta que esa relajante sensación hace que pasé, al plano fantasioso y deje de pensar, y me duerma para intentar despertar de esa cruda pesadilla llamada realidad.
Y tan solo pensar, en lo que unas gotas rebotando y corriendo en mi ventana, esto pueden causar.

Relatos Pasajeros de una Mente DivaganteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora