Mi madre solía decir que las peores personas son las que engañan, ahora sé que es cierto. Y la persona que me hizo entender eso, fue ella.
Si te la topas, corre.
Si la ves, deja de hacerlo.
No le hables, no lo hagas.
No la retes, no la enfrentes.
Y...
Bueno, los actualizo. Son las 7 de la noche, Cameron y el otro chico (cita de Megan) pasarían por nosotras a las 9. Y Megan estaba desesperada, ya que había comprado 2 vestidos, y no sabía cuál usar.
Yo por mi parte, decidí por algo sencillo. No sabríamos a dónde iríamos después de todo. Un simple vestido negro de tirantes, botines negros (con tacón que claro que Megan me obligó a usar). Y mi chaqueta de mezclilla favorita.
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Megan me miró como si estuviera loca cuando me puse la chaqueta. -No iras a una cita con eso. Quitatelo. - Le di un manotazo para que dejara mi chaqueta. -Meg, vamos a una cita, lo primero es sentirte cómoda, lo segundo, la persona con la que vas a la cita tiene que saber tu estilo. No voy a ir a una cita con una ajustada y ridícula chaqueta negra. Pues si no voy a un funeral. -Meg me miró por unos segundos, y luego bufó. -Entonces esos vestidos no los usaré.Me prestas algoooo? -Me miró con su carita. Bufé -Está bien, escoge lo que quieras, pero tú lo recoges. -Asintió y ya se encontraba baseando medio closet para encontrar algo para ponerse. *** Después de 30 minutos, se decidió por algo. Debo admitir que tiene buenos gustos.
