Capítulo 1: ¡LIBERTAD!

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¡AL FIN SOY LIBRE!, fue lo que grité cuando me animé a terminarle al tóxico de mi ex, fue una relación tormentosa, él me engañaba y yo lo perdonaba, me trataba como quería y me quedaba callada, coqueteaba con chicas en mis narices ¡y yo no hacía nada! losé «Naely, que tonta eres por soportar todo eso», y sí recien me doy cuenta que lo fui, creía que era el hombre de mi vida, mi verdadero amor  y supongo que por eso aguantaba todo, pero ya no, logré dejarlo (hasta me deseo la muerte), pero a pesar de haber estado 3 años con él no lloré, no me sentí triste, absolutamente nada, fue todo lo contrario, empecé a salir más con mis amigos, iba a fiesta sin miedo a que él me este mandando mensajes preguntando donde estaba y con quienes, sin sus celos enfermizos que lo único que hacia era alejarme del mundo. Empecé a conocer gente nueva, y varios chicos empezaron a agregarme a Facebook como si supieran que estaba soltera, igual les aceptaba la solicitud, con varios entablé una bonita amistad, otros solo querían tener algo más conmigo, pero yo queria estar sola y terminaban bloqueandome de todo, pero bueno...

Hoy desperté super feliz, va a venir mi mejor amiga Elena Urdanela, somos amigas desde que tenemos 7 años, ella es como una hermana para mi y una hija más para mis padres, tanto así que les dice mamá y papá, sin duda alguna mi familia es su familia. Elena vendrá a mi casa despues de tiempo ya que por cosas de la vida estudiamos es distintas ciudades.
Salí de la cama, fui al baño a lavarme la cara, los dientes y peinarme un poquito, luego bajé a saludar a mi mamá
─Buenos días mamá  ─lo dijé con una sonrisa en la cara mientras me acercaba para darle un beso en la mejilla.
─Buenos días puchunguis   ─mi mamá me dice así desde que tengo uso de razón, no me molesta que me llame de esa forma incluso delante de mis amigos, es su forma de demostrarme su cariño y acepto eso  ─, ¿como amaneciste? recuerda que hoy vendrá Elena así que terminando de desayunar subes a arreglar tu habitación.
─Amanecí bien mamá  ─gracias por preguntar, es normal que ni bien despierte ya estes mandandome a hacer cosas ─, pero mamá Elena es como de la familia, no creo que importe que mi habitación este algo desordenada, no? ─dije poniendo una sonrisita media temerosa, pero en ese momento sentí el verdadero terror, mi madre con solo mirarme ya sabía lo que me queria decir...

─Mamá es obvio que ordenaré mi habitación, solo fue una bromita jeje  ─me senti aliviada al ver a mi mamá riendo por la risita que solté, me entregó mi taza de café y empezamos una conversación mientras tomabamos desayuno.

─Hija, ha pasado muy poco tiempo desde que terminaste con Juan  ─sí hablaba de mi ex, denuevo  ─ y me parece muy bien que estés tomando esta situación de la mejor manera, me alegra ver como te diviertes y sales con tus amigos siempre quise verte así, feliz y libre  ─al oír esas palabras de mi madré sonreí y la abracé con mucha fuerza, sabía que siempre podía contar con ella, siempre estuvo conmigo apoyando mis decisiones de seguir con Juan, a pesar que me vio sufriendo y llorando por él.

─Gracias yo me siento igual de volver a ser yo, te amo

─Te amo más bebé, ahora ve a ordenar tu cuarto que ya falta poco para que Elena llegue.

Me levanté de la mesa y subi a ducharme, la noche anterior ya había dejado mi ropa lista, unos jeans negros, un top celeste y unas zapatillas negras que siempre usaba, me tiré a la cama, agarré mi celular, entré a WhatsApp y le mandé un mensaje a Elena

─Ele, en cuanto tiempo llegas?

─Maee holaaaa, quizás en un par de horas esté por allá

─Bien, me avisas cuando ya estés cerca para que entres como perra empoderada a la casa jaja

─Me parece una genial idea, vale yo te aviso

Salí de la aplicación e ingresé a instagram, y me di cuenta que mi crush Luis Arredondo había publicado una nueva foto

─Que guapo es este hombre por Dios  ─dije mentalmente 

Seguí en instagram y empecé a ver los insta stories  y apareció una muy graciosa, solo atiné a reaccionar y a los segundo me apareció una notificación de un mensaje en ig, era la persona a quien había reaccionado, vi el user  y recien me di cuenta que era un chico que conocía desde primaria, pero jamás habíamos hablado por equis motivos, abrí su chat y decía «Jajaja ¿Cuanto mides?»  al ver ese mensaje se formó una gran expresión de duda en mi rostro, pero venía junto a una sonrisa en mis labios, le iba a poner «que raro eres al preguntar eso», pero no lo hice, ya que sentí que sería muy grosera, así que solo atiné a responderle.

 ─158 centimetros, ¿y tu?  ─Dioos mío que tonta me sentí al responder eso, Naely no se te pudo ocurrir algo más original...
─Promedio, bien ah. Yo mido 174 centimetros

─Oh genial, pero ¿a que se debe esto?  

─Acaso ¿no puedo preguntar? 

En ese momento sentí que me estaba retando, pero además de eso, no era "normal" iniciar una conversación de esa manera, fue el mensaje más random y tonto que había leído, a pesar de eso no le tome importancia

─Claro que puedes  ─dije

 ─Naely, creo que te conozco  ─en ese momento mis ojos abrieron tanto que parecia que se me iban a salir, estaba asustada y nerviosa, ya que sí nos conociamos pero solo de vista, pero tenia algo de vergüenza ya que sinceramente a mi me "llegó la pubertad " a los 16 años y en esas épocas era un palito andante, era super delgada, mientras procesaba ese mensaje en mi cabeza me llegó otro mensaje de él...

─¿Donde estudiaste en primaria?  ─Demonios, se acordó

─En la primaria N°35  ─me hice la que no lo recordaba y no sabia nada de él ─, ¿ y tu?

─¡Yo también! con razón te me hacias conocida  ─quería que me trague la tierra, no se porqué me importaba tanto como me tenía en mente, pero quería desaparecer.

─Ah... sí, ya te recordé Aarón Andrade, ¿cierto? 

Luego de mi mensaje, que para mi fue super normal, él mando un emoji riendose seguido de un mensaje...

 ─El mismo, pero pensé que ya lo sabías ya que en mi user dice mi nombre  ─Que carajos te pasa Maely, ahora me sentía aun más tonta que antes ─, pero no te preocupes yo también acabo de reconocer tu nombre, Maely Sandobal.

No se que pasó, pero al leer y darle un tono imaginario de como dijo mi nombre, lo sentí tan sexy que mi piel se puso chinita, no sé que me pasa no es normal sentir estas sensaciones solo por un mensaje, que tonto. Mi madre me sacó de mis pensamientos entrando a mi habitación 

─Maely Sandobal ─claro que eso no sonó nada sexy─, te he estado llamando desde hace rato para que bajes a saludar a Elena, ya llegó

─¿YA LLEGÓ ELENA? ─dije casi gritando

─Si Maely, que haz estado haciendo que tu habitación sigue igual? ─se notaba en su rostro que estaba enojada, no sabia que decirle, pero menos mal que fui salvada por la campana llamada Elena que entro a la habitación.

─Mamá Osa ─Elena le dice así a mamá desde que eramos pequeñas─, no te enojes yo ayudaré a Maely a ordenar su habitación ─mamá sonrió y se retiró, pero sabia lo que me esperaba cuando se vaya Elena.

Me levanté de la cama para empezar a ordenar y Elena empezó con sus chistes tontos

─Que pasó Mae, me quedé con las ganas de entrar a la casa como perra empoderada ─lo dijo haciendo un pucherito, me reí y le tiré un almohadazo en la cara.
No sabia como contarle lo que me acababa de pasar, no era nada de sorprenderse, pero al hablar con él me sentí distinta, algo que no sentía hace mucho tiempo...

Este es el primer capitulo, espero que les guste mucho ya que ciertas partes con cositas que realmente yo pasé. Le estoy poniendo todas las ganas para ir mejorando capitulo tras capitulo, disfrutenlo mucho.

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xoxo

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⏰ Última actualización: May 15, 2020 ⏰

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