Capítulo 1: Justicia decidida (y el chico guapo)

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Igual que todas las mañanas, Midoriya Izuku observó el tablero principal que estaba en la entrada de la UA. Entre los miles de papeles con avisos sobre cursos con Vlad King y las semanas de vacaciones, relucía una bandera arcoíris tachada con una gran cruz roja, seguida de la frase "No aceptado". El chico sintió como le hervía la sangre y desvió la mirada con rabia, pateando la pared frontal del muro.

A decir verdad, ya estaba acostumbrado. Desde el principio del año escolar hace un mes, la escuela se encargaba de recordarle a él y a todos sus compañeros que las personas del colectivo LGBT+ no llegarían a nada, y mucho menos a héroes. Izuku se mordió el labio con amargura. Ni siquiera podía imaginarse cuál sería el destino que le llegaría si alguno de sus profesores o el director Nezu se enteraba de que él era gay. Muchos de sus amigos y compañeros de clase eran bisexuales, asexuales, arrománticos, trans; entre las chicas, muchas eran lesbianas... Debían vivir ocultándose, vivir con el miedo de que su sueño de ser héroes muriera solo porque la escuela impartía ese odio hacia el colectivo.

¿Y la sociedad de Musutafu? Nunca se enteraba de nada, o fingían no hacerlo. La mayoría de ellos eran conservadores, pero Izuku tampoco descartaba que Nezu evitara que se difundiera la información. Entre los profesores, los únicos en los que podía confiar y sabía que los apoyaban eran Aizawa, Midnight y Mic. Solo habían pasado dos semanas desde que, All Might, su maestro y el responsable de heredarle el One for All, se había retirado de la enseñanza en la escuela por una pelea con Nezu y estaba trabajando en otro lugar de Musutafu. Izuku lo veía cada unas semanas y era de los pocos adultos con los que podía ser el mismo, además de su madre.

¿Vivir así era vida? ¿Valía la pena ser un héroe en esas condiciones? ¿Un grupo de simples estudiantes podrían rebelarse contra esa represión sin perder su sueño?

¿Qué podía hacer él?

Izuku levantó la cabeza, con los ojos abiertos como platos. Había algo que podía hacer, algo peligroso pero que lo podía mantener en el anonimato y con lo que expresaría su descontento efectivamente. Una leve sonrisa iluminó su rostro y tomó su celular para comenzar el plan, pero justo en ese momento un auto llamó su atención. Desde el lado del conductor descendió un hombre alto y corpulento con un saco negro hasta el cuello, y los ojos del chico se iluminaron con emoción al notar que era Endeavor, el héroe número 2 y uno de sus ídolos. Entonces eso significaba que...

Por la puerta del acompañante apareció un muchacho. Parecía unos cuantos centímetros más alto que él, era delgado, mucho menos fornido que Endeavor y llevaba puesto el uniforme de la UA. Izuku pudo ver como su mano se dirigía rápidamente a la ropa y tiraba de ella con expresión molesta. Tenía el cabello ligeramente largo, una mitad roja y la otra blanca, y cuando levantó la cabeza dentro de la anatomía de su rostro aparecieron sus ojos, marcados con una heterocromía gris y celeste, y una cicatriz de quemadura sobre el lado izquierdo. ¿Cuántos hijos tenía Endeavor? No lo recordaba muy bien.

Era realmente atractivo.

Izuku levantó su teléfono delante de su rostro para disimular, pero seguía viendo la escena delante de él. Endeavor conversaba con su hijo, quien le sonreía suavemente y asentía, aunque por su lenguaje corporal podía notar nervios mezclados con emoción. Luego de unos segundos, el héroe número dos le revolvió el pelo con cariño y volvió a subirse al auto, alejándose por la carretera. El muchacho volvió a arreglar de su saco y se dirigió a la entrada con rapidez. Izuku sintió como se le subían los calores e intentó girarse hacia la enorme puerta, pero en ese impulso ansioso el celular salió disparado de sus manos, cayendo justo a los pies del recién llegado.

Izuku lo miró buscando una excusa, pero él se agachó en silencio y lo recogió, acercándose.

- ¡Ah, lo siento!- exclamó, nervioso- F-Fue un accidente

Pero el hijo de Endeavor solo le sonrió y dejó el celular en sus manos, entrando al edificio. Izuku se tocó las mejillas con las manos, notando el calor que emanaban.

Era realmente atractivo.

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Las clases con Cementoss solían ser las más intensas. Izuku sentía menos aburrimiento porque el hijo de Endeavor, que se llamaba Shoto Todoroki, había sido presentado a la clase esa misma mañana. Aizawa les había comentado que hubo unos problemas en su ingreso a la escuela y por eso se había retrasado un mes, pero desde ese momento era compañero de la 1A y debían tratarlo como tal. Izuku pudo confirmar que no era solo él quien estaba atraído por él, Uraraka y Mina se habían pasado toda la presentación cuchicheando. El chico intentó apartar ese pensamiento de su mente, sacudiendo la cabeza. Tenía que evitar pensar en eso o su futuro como héroe estaría en peligro...

Su mente volvió inmediatamente a la idea de aquella mañana y sigilosamente escondió el celular detrás de su libro, abriendo Twitter. La nueva cuenta que había creado le dio la bienvenida, y tan rápido como pudo, envió su primer tweet. Mientras Cementoss hacía una pregunta y Momo se levantaba a responderla, Izuku deslizó el teléfono en su bolsillo y volvió a prestar atención en la clase, sin enterarse que sus palabras estaban siendo compartidas entre miles de personas y ganando reacciones positivas, difusión, respuestas enviándole buenos deseos y pidiéndole que hiciera lo mismo en sus lugares.

En la cuenta @mariyafortot, con un icon de una máscara de zorro colorado y el nombre artístico de Mariyato, un tweet se había viralizado.

"Hoy por la noche haré el primer asalto. Musutafu, ciudad de ignorantes y conservadores, que se prepare para la rebelión del Vigilante. El colectivo LGBT+ te arrastrará hasta lo más bajo del infierno." 

En tus alas de colores [Tododeku AU]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora