Y Si Decides Quedarte Conmigo

419 40 68
                                    

SasuNaru.



¿No crees que esto es un poco arriesgado?—susurró contra el escritorio, de frente a aquel hombre que siempre traía problemas.

—¿Acaso no es eso lo que lo hace divertido? —con su dedo pulgar presionó el labio inferior del rubio, deleitándose al tenerlo a su merced, esa boca tan rebelde, ahora estaba bajo sus manos, deseosa de roces indebidos.

Arremetió contra los labios ya rojos por los anteriores besos, disfrutando de esa dulzura tan contrastante con su personalidad, quien diría que aquel chico explosivo sería su perdición. Lo tomó de las caderas para dejarlo sentado en la mesa de madera, Naruto no dudo ni un instante en enrollarlas alrededor de su cintura, creando el encuentro de ambas erecciones, lo que robo un suspiro de ambos.

—Discúlpame el abuso, pero voy a dejar muchas marcas en este cuello tan bonito tuyo. —deslizó un dedo por la zona. —Espero que no te moleste… —sin hablar más lamió y mordió todo lo que pudo, dejando grandes marcas oscuras, quienes juraban ser duraderas. Aquellas serían suficientes para alejar todas las mierdas que tenía cerca.

—Sasuke…—llamó—Sasuke —lo separo por los hombros. — Alguien puede entrar en cualquier momento.—Por un instante se había quedado sin palabras, no podía creer que tuviera a ese hombre a sus pies dispuesto a hacerle lo que quisiera. Quería enterrar los dedos en ese cabello azabache y morder sus labios hasta perder el aliento. Quería ser el motivo por el cual esos ojos inexpresivos brillaran. Podía darle todo lo que quería e incluso más

Pero no en el salón de clases, que no tenía seguro.

—Sh. —Sasuke tomó el rostro de Naruto entre ambas manos y lo miró directo a los ojos. —Tu solo disfruta.

—Deberías tatuarte una cabra, idiota.— con un suspiro de resignación dejó que Sasuke siguiera en su trabajo de “marcar lo que es suyo” palabras de él.

—¿Y tu serás mi pecado?—

Recostó a su rubia adoración y procedió a deshacerse de esa molesta camiseta escolar, lo botones rebotaron por todo el salón en un eco ruidoso por varios segundos, y Sasuke sin importarle la mirada de reproche de Naruto deleitó todo su esbelto cuerpo color canela. Desprendía olor a vainilla por todos los poros.

Verlo andar era una tortura medieval, tan cerca pero tan lejos. Diario sentía la necesidad de hundir las manos en sus carnes y saciarse de el.

Siempre encontraba un tiempo y lugar, donde sea. En el baño, en la iglesia, el tren o incluso en un salón de clases.

Dibujo un camino de besos húmedos en todo el torso superior y se detuvo en una de las cimas rosadas bien erguidas en busca de satisfacción. La engullo como si se tratara de un dulce pastelito, lamio y mordió teniendo como porra un recital de gemidos.

La mano que tenía libre no perdía tiempo, está estaba en la parte donde más excitación se acumulaba, en aquella cima que cada vez se tornaba más dura.

Una vez satisfecho con el desastre que había causado en su pecho subió la vista para encontrarse con una imagen de lo más afrodisiaca, tenía que capturar el momento y luego hacer un cuadro que ocupará toda la pared de su casa.

Naruto debajo de el con las mejillas sonrojada, los labios rojos e hinchados, la camisa del colegio holgado a los lados revelando aquel cuerpo de infarto. Y el toque final.  Las marcas cada vez más rojas con motas violáceas en su cuello.

Perfecto.

Sumamente perfecto.

Naruto tiro de la corbata de Sasuke para atraerlo a sus labios, lo beso con fervor, tirando de los cabellos de su nuca, paseando su lengua por todos los recovecos que pudo encontrar, deleitándose con los gruñidos que dejaba escapar.

Mordió su labio inferior y descendió hacia un poco más debajo de su cuello, en la partes de las clavícula, donde tampoco se quedó atrás y comenzó a dejar chupetones.

Amaba como resaltaban en la pálida piel de Sasuke, le daba un aire distinto.

Ambos se mantuvieron en un beso que parecía eterno, siempre existía la lucha por quien tomaba el control, se hacia larga, nadie quería ceder el trono, Naruto decía que por el ser el de abajo merecía tener las riendas en los besos, pero Sasuke alegaba que el nunca sería el segundo en nada y que le pertenecía el control total.

Nunca llegarían a un acuerdo, pero eso era parte de su relación.

Sasuke rompió el beso, se deshizo de los pantalones de Naruto, quedando maravillado por aquellos muslos tan suaves. Nunca sería suficiente. Era un ser insaciable, y más cuando se trataba de su rubio. Elevo ambas piernas y las coloco sobre sus hombros.

—No Sasuke… ¡N-… —sus quejas quedaron ahogadas ante la llegada de un poderoso estremecimiento.

—¡¿Hola?! ¿Hay alguien ahí? —nunca antes les habían cortado el rollo de tal manera.

—Me cago en todos sus muertos.—susurro Sasuke, al fin había encontrado un momento para hacer suyo a su novio y tenían que llegar las personas estúpidas, es que el mundo está infestado de gente idiota.

—¡Sh! Teme, te oiría. Y ya súbete los pantalones. —Naruto intentaba recoger todos los botones blancos esparcidos por el suelo. Al mismo tiempo que buscaba una forma de acomodar su cabello.

Con un gruñido muy propio del chico bomba Sasuke subió sus pantalones y abrocho su cinturón con desgana, tomó el bolso que había tirado un tiempo atrás y se lo coloco sobre la potente erección que una vez más probablemente moriría bajo el chorro de agua helada.

Observo Naruto en frente suyo acomodando su abrigo de tal forma para que sus marcas no se notarán.

—No sonrías estúpido, que esto es por tu culpa ¿a quien se le ocurre marcar a la gente como si fuese una puta vaca? —la sonrisa de medio lado de Sasuke no pudo hacer más que ensancharse, Naruto resoplo y aunque estuviese un poco enojado se acercó a él y rehízo el nudo de la corbata de Sasuke. Cuando se separo la puerta se abrió dejando ver a una muy tímida profesora.

—Lo sentimos señorita, Naruto había olvidado un libro y yo quise acompañarlo..

—O-oh no pasa nada joven, tenía miedo de que se hayan quedado encerrados. —observo a ambos chicos con ojo crítico, había algo en la atmósfera que no cuadraba con su cuartada, no sabia si era el cabello revuelto de Sasuke o como Naruto tenia el mentón hacia abajo, como queriendo ocultar algo ¿Qué querría esconder un joven tan educado como el? No había razones para mentir, los consideraba a ambos unos chicos de bien.—Pueden marcharse. —ambos tras un asentimiento abandonaron el aula la cual iba a ser su confidente. Ambos igual de frustrados se dirigieron a su hogar sin decir una palabra.

—Límpiate los pies antes de entrar, mamá siempre se enoja cuando manchas su alfombra.—aconsejo Naruto metiendo la llave en aquella gran puerta de madera, se encontraban en la propiedad
Uchiha-Uzumaki

—Como digas… Hermanito. —sonrió con altanería al ver el ceño fruncido de su par y se adentro al hogar no sin antes palmear el trasero ajeno. —Te espero arriba.

—————————

Hola! Soy Dokusha nomi, aunque pueden decirme solo Dokusha. ¡Bienvenid@! Espero tenerte en muchas de mis historias.

¡Gracias por leer!

Nota primera:

¿Incesto? ¿O hermanastros?

NUNCA LO SABRÁN AJAJAJJA

Perdón, 👇

¡Holaaaa! Bienvenidas y bienvenidos a una más de mis historias. Está vez, como ya habrán leído, las partes no tendrán conexión unas con otras.

Solo son pequeños capítulos con lemmon.

¡Acepto propuestas de posibles escenarios, todo esta permitido ¿incesto? Mandale, ¿M-preg? También, ¿Shota? Por supuesto! 👉

Lxs quiero muchos, nos vemos en la próxima ❤️🇦🇷

Pd: ¡Ya tenemos instagram! Podes encontrarme como Dokusha_nomi
https://www.instagram.com/dokusha_nomi/

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Nov 08, 2020 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

One-Shots [SasuNaru/NaruSasu] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora