Tómame o déjame

Parte 1: Descubriendo

Anastasia 

¡No me lo puedo creer! ¿Acaso es una broma de mal gusto? Por favor, ¡¿Dónde están las cámaras?¡ Acabo de llegar a la universidad y me encuentro con esta noticia. Mi ex novio ya está con otra. ¡NO¡ Mejor dicho con la estúpida de Melanie Smith. Juro que si no tuviera a los casilleros tras mi espalda estaría tirada en el suelo con convulsiones botando espuma por mi boca. En el verano a mi ex novio se le ocurrió la genial idea de "tomar distancia" porque según el sentía que no amaba lo suficiente como para hacer ... el amor. Lo que el no entendió es que no es que no lo amara, si no, que soy virgen. Me da mucho miedo confesarlo, ya tengo 23 años, y ya debería... saber ciertas cosas, pero nunca he tenido otro novio excepto él, Michael Gray. Por Dios santo, estuvimos juntos por 7 años, toda mi adolescencia se la entregué de lleno, pero el lo olvidó en menos de un mes, y lo olvidó de la peor forma... estando con ese metro setenta y cinco de pelo rojo y curvas sensuales, y por supuesto, lo total y completamente opuesto a mi.

Mientras trato de digerir la nueva información me dirijo a mi sala de clases, que por suerte me aleja de la pareja de enamorados, pero los tendré que enfrentar más tarde, ya que por amor, Michael y yo, preferimos estudiar en la misma universidad y la misma carrera. ¿Amor puro y verdadero no?

Lo primero que veo al llegar a la sala son a mis amigas, que parecen ya saber la noticia porque me miran con cara de perro abandonado.

- ¿Qué? - les pregunto en tono un tanto hostil. La primera en contestarme es Abby.

- ¡Hey! No te desquites con nosotras señorita, solo estamos esperándote - ¡Ja! Del grupo la más lengua suelta es Abby, tiende a ser conocida como chismosa y poco discreta, pero lo que tiene lo malo lo gana de guapa y buena amiga. Si tuviera que elegir algún cuerpo por un día sería el de ella, además de ser estupenda tiene una capacidad para atraer a los hombres impactante, es como si cada día antes de salir de casa se cubriera de algún tipo de perfume afrodisíaco.

 - Ana, te guardamos un puesto, ven aquí antes que empiecen a llegar los demás - ¡Ay mi Amy, la amo tanto! Dentro de las 4 amigas, ella es la mejor, somos almas gemelas, apenas la miro y sé lo que le pasa y ella sabe lo que me pasa a mí. Creemos que cuando niñas fuimos separadas porque nos parecemos demasiado. Ella es la única amiga que conozco desde antes de la universidad, llegamos juntas aquí ya que no nos queríamos separar, y así conocimos a Marie y Abby, desde somos una especie de cuatrillizas con distintos apellidos.

- Pfff... ¿Podría empezar peor este año? - pregunto sentándome donde me indicó Amy

- La verdad es que yo les dije, sobre todo a ti Ana, a ese embustero se le notaba por los poros que solo estaba contigo por "eso", y cómo tu te hiciste de rogar ¡Pum! Se liga con esa pac-man. - las cuatro estallamos en risa, Marie solía tener ese humor negro, y le encantaba colocar sobrenombres a las personas, sobre todo si esas personas eran como Melanie.

- Pensé que volviendo a clases el se iba a disculpar, imaginé que me extrañaría. - Empecé a sentir que se me nublaba la vista, pero con fuerza traté de mantenerme firme, no quería regalarles ni mis amigas, ni los demás un espectáculo.

- Tranquila Ana, ese cerdo se lo pierde. Además no creo que dure mucho con esssss....aa....- Las tres nos quedamos mirando a Abby que tenía cara de niña mirando un chupete. Luego miramos al punto donde ella estaba embobada, y sip, todas quedamos igual. Se trataba ni más ni menos de Noah Johnson, el hombre más sexy que habita en la tierra, al menos para mi. Es de esos estilos chico malo, con chaqueta de cuero, pelo revuelto, y mirada asesina, pero en lo nadie, nadie le ganaba era en arrogancia. Sabiendo que todas lo estábamos mirando se pasó una mano por el pelo, y giró hacía nosotros y juro por Dios, que guiñó un ojo. Lo sé, no estoy loca, fue un gruiño. Definitivamente este año sólo acaba de comenzar.