Un Amor Clásico

Capítulo 21: Recuerdos De Una Voz Paterna

Mi padre a muerto, el no era tan malo pero ahora
¿Todo será como antes?
¿Como si nada hubiese pasado?
No creo.

Samara: Kayn.- Dijo mi madre sacandome de mis pensamientos.

K: ¿Uh? ¿Que sucede?- Ella suspiro y me dio un sobre.
K: ¿Que es esto?- Dije confundido mientras leía lo que decía el sobre.

Samara: No lo se, tu padre te lo iba a dar el día del accidente pero creo que no pudo así que te lo daré yo de su parte. Leelo a solas el lo pide en el sobre.- Di un pequeño asento con la cabeza y espere a que mi madre saliera no sin antes tener una larga plática.

Ya estábamos en casa y me dirigí a mi habitación a darle una sesión de limpieza mientras mi madre preparaba la cena, otra vez sólo cena para dos... Después de terminar me acosté en la cama y abrí el sobre que mi padre me dejo. Dentro había unas coordenadas y una nota.

"Si tienes esto en manos es porque algo salió mal"

Al parecer ya sabía que algo así pasaría. Me levanté y me puse a investigar las coordenadas que había en la hoja.

Samara: ¡Kayn, ya está la cena!- Exclamó mi madre desde las escaleras.

K: ¡Y...Ya voy!- Respondí y cerré la laptop bajando casi enseguida, acto seguido me sente en el comedor y empecé a cenar.

Samara: Entonces hijo, ¿como tomo Amber esto? Supongo que debe estar mal ¿no?- Dijo mi madre tomando un poco de café.

K; Pues mas o menos, aunque se siente algo culpable y me dijo que haría lo posible por compesar la perdida.-

Samara: ¿Algo como ponerle el nombre de tu padre a tu hijo?- Yo me ahogue un poco y mi madre sólo soltó una carcajada.
Samara: Vamos no te lo habrás creído ¿o si?-

K: M...Mamá b...basta casi me ahogo.- Ella río más.-

Samara: Bueno está bien, pero hoy te toca lavar los trastes.- Solté un suspiro largo y me levanté a lavar los trastes.
Samara: Mi hijo lavando los trastes, ya te puedes casar.- Dijo mi madre con un claro tono sarcástico.

K: Mamá para.- Ella río más mientras me veía desde la puerta de la cocina.

-*-

Ya es tarde y no puedo dormir, la intriga de lo que allá en esas coordenadas me mata.

Me levanté y me vestí rápidamente...

(Espera.. ¿como iré allá? Tengo el brazo roto....)

Y derrepente una idea.

Tome mi teléfono y con algo de torpeza marque a Ken el cual respondió con una voz algo cortada y baja.

Ken: >¿Eh? ¿Kayn? ¿Sabes que hora es?<

K: >Si Si, lo se pero necesito que conduzcas por mi. <

Ken: >¿En tu auto o en el mio?<

K: >Trae el tuyo, el mio pues... ya sabes. <

Ken: >Ah es verdad, bueno voy para; llegaré en unos 8 minutos.<

K: >Ok, te espero fuera de mi casa.<

Ken: >Si si.<

El chico colgó.

Yo guarde el celular y baje las escaleras para después tomar mis llaves y salir al pórtico de la casa.
Descubrire lo que hay en esas coordenadas.

Esta algo nublado, apenas y se ve la lluvia pero eso evitó que llegará mi amigo en su auto lo que al verlo procedi a subir a este.

K: En verdad, gracias amigo.-

Ken: Ya sabes esto es lo que hacen los amigos, ayudar a su compañeros a superar un trauma.- Rei un poco y lo golpee un poco en el hombro.

K: Vamos arranca antes de que te de otro puñetazo y quedes igual que yo.-

El chico bufo un poco pero al final terminó arrancando.
   Y después de un algo largo viaje y teniendo charlas triviales para seguir despiertos, llegamos a donde marcaban esas coordenadas.

K: ¿Vienes?- Dije mirando al chico a mi lado a lo cual este asintio y se quito el cinturón de seguridad.

Ambos bajamos del auto y con una pala en mano por si algo o alguien nos ataca, seguimos un pequeño sendero a un arbol que marcaba el papel y sin pensarlo Ken empezó a escavar cerca de ahí lo cual se complicó más por la lluvia que empezaba a caer.
  Y tras unas horas y algunos huecos junto con bromas despues, Ken hizo chocar la pala con una caja de metal.

En el momento en el que mi amigo la saco de aquel agujero una suave brisa fría se hizo presente, el me la paso y con algo de curiosidad la abrí y dentro habían fotos mías con mi padre y una nota que al leerla me formó una sonrisa junto con algunas lágrimas.

    Después de tapar los agujeros me dirigía a casa con Ken aunque antes nos detuvimos en la carretera donde en la orilla se encontraba una cruz blanca de roble clavada en la ya mojada tierra por la interminable lluvia.
       Me acerqué y me inque dejando unas flores.

K: Gracias papá. - Dije con lágrimas en los ojos sonriendo y esa suave brisa abrazando mi mojado cuerpo.

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Nota De Papá

Si lees esto es que ya has encontrado la cápsula. La escondi aquí porque aquí traje a tu madre en nuestra primera cita después del anuncio de su embarazo y aquí fue donde te pusimos tu nombre.
Tal vez no fui el mejor padre al abandonarlos pero al saber que estas leyendo esto me da la fuerza para decir que te amo hijo mío y pedirte que no cometas mis errores. Espero cuides bien de tu madre y de tu chica ideal.

Atte: Victor K. Joseph (Tu Padre).