Costumbre

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Damián no era un chico de costumbres, o bueno no de costumbres tontas. Sabía que debía respetar y seguir las costumbres enseñadas por su madre y abuelo.

Como por ejemplo, la pareja elegida. Un heredero, líder de la liga de asesinos, elegía al mejor de lo mejor para ser su compañero, estando este de acuerdo o no, si no pregúntele a su madre, que drogo a su padre para tener un heredero. Su madre eligió a Batman, como el mejor hombre para estar a su lado, lamentablemente este no quería eso.

Pero cuando Damián pasó a estar bajo la protección de Batdad, pensó que no tendría que seguir más constumbres o algo parecido, se equivocó. Fue el cuarto Robin, siguiendo la  costumbre de los hijos de Bruce, y le pareció bien, al contrario el lucho por el lugar,  que como hijo legítimo de Batman merecía. Esa era una constumbre de la que quería ser parte, pero la otra... Dudaba siquiera que fuera una constumbre lo suficientemente honorable para seguir.

Si a Damián le permitieran señalar culpables, lo cual haría aunque no se lo permitieran, diría que todo era culpa de su padre y Drake, porque si no fuera por ellos, ni siquiera hubiese llegado a convivir con el pequeño Kent. Sí, Definitivamente la culpa la tenían su padre y Drake, sí era su culpa completamente, volvía a recalcar por si quedaba duda. Porque? Porque cada vez que se querían juntar con los Kent, quien tenía que hacerse cargo de la cría menor de Kent? Pues él, Damián, como si fuera una obligación o constumbre. Claro, como si él no tuviera nada mejor que hacer lo dejaban con el pequeño alien.

Necesitas hacer amigos - solía decirle su padre, para luego perderse en alguna parte con el alien mayor y dejarlo a su suerte con el alien menor. Y Damián Wayne, tenía que lidiar con las tonterías de un niño con sonrisa brillante y exceso de energía. -Eres un lindo niño, verás que le gustará hacerte compañía - cuántas veces había escuchado a Drake decirle eso a Jonathan, para que lo entretuviera para que él (Tim) y Conner se pudiera escapar a hacer sus  cochinadas en su habitación, debió acusarlos cuando tuvo la oportunidad, aunque dudaba que su padre ya no lo supiera. Era culpa de Drake y su padre, más la de Drake que vivía poniéndole ojitos al estúpido clon. Como alguien con el cerebro de Batman y Red robin podía encontrar encantador a alguien tan soso como los Kent, ellos eran la definición de super idiota, super simple y super feliz, de manera empalagosa y molesta.

Y ahora, con qué derecho podían culpar a Damián, de encariñarse con el pequeño Kent, claro, era un simple cariño que le tiene un amo a su mascota, y se negaba a admitir que fuera algo más. Con el tiempo encontró que ser amigo del pequeño alien, no era tan molesto, ja! Incluso lo encontraba entretenido y divertido, siempre podía usar su ingenio y la ingenuidad de Jon para burlarse. Los años pasaron, la amistad nació y fue creciendo, transformándose en algo más... 

Damián, lucho, realmente lo hizo porque el no quería ser parte de esa costumbre. Apenas y se dio cuenta de lo que probablemente estaba sintiendo, porque obviamente para un niño criado en  la liga de asesinos, no era viable el tener esos sentimientos y menos por alguien tan poco compatible como lo era Jon.

Lo dejaste ir? - no había querido escuchar la conversación que su padre sostenía con Clark, pero era una de esas cosas que se te arraiga con el tiempo, al ser entrenado por Batman . Fue así como de enteró de la partida del pequeño alien, este se fue sin decirle nada, o sea a él, su due...mejor amigo, se sintió herido, traicionado. Eso le pasaba por ser tan emocional, le diría su madre, pero era su Jon, su amigo, jamás pensó que este le haría eso, diablos, hablamos de un Kent, los boy scout por excelencia. Los chicos que no dañan  estando conscientes, o eso había aprendido con los años conviviendo con ellos, y vaya que había tenido bastante tiempo de conocerlos, porque todos eran así, Clark, Conner, Chris...y pensó que Jon también -

***M***

Hola, Dami -  salto hacia atrás, alejándose lo más posible de intruso que había osado sorprenderlo -

Aléjate! - saco rápidamente su katana, y su mirada verde recorrió al desconocido de arriba a bajo, buscado saber quién era -

Tranquilo, no quería asustarte. Solo que... - el de ojos azules trato de apaciguar la situación, no quería que Damián le atacará en su reencuentro -

Jonathan... - eso era imposible, o sea como paso ésto. Apenas y habían pasando unos días o semanas, nada tan exagerado como para que Superboy este de esa manera. Allí estaba él ahora viendo con desconcierto, al pequeño, no tan pequeño ahora, Kent - como había crecido tanto? - Lo odiaba, si antes odio ser, ligeramente, no mucho, obvió,  pequeño que Jonathan, ahora odiaba la GRAN distancia en tamaños que había. Odiaba los genes Wayne, porque su padre no podía ser más alto, bueno, no era culpa de su padre el ser más pequeño que el alien, y por resultado que el fuera más pequeño que Jonathan, pero aún así le molesta -

Sí, soy yo! - el adolescente sonrió feliz al ser reconocido por su mejor amigo - te extrañe tanto - abrazo con fuerza al ahora menor, que en su aturdimiento no pudo evitar el abrazo. Se estaba volviendo descuidado, eso merecería una reprensión de su madre, pero es que era Jonathan, el niño que fue su primer amigo a quien no podía negarle una sincera sonrisa a quien, sin darse cuenta, había entregado su corazón -

Suficiente - apartó al hijo de Superman que con una sonrisa avergonzada se alejó. Vaya que había crecido, y si que había crecido. Se sonrojo, debía dejar de escuchar a Drake y su padre, o terminaría en malos pasos - nada mal Crybaby - le sonrió, como solo se permitiría hacerlo frente a él - nada mal - se tuvo que estirar un poco y Jonathan agachar de la misma manera para poder tocar su rostro - invulnerabilidad? -

No siempre funciona - se encogió de hombros y desvió la mirada -

Entiendo - porque Damián lo sabía, había crecido en un lugar que le había dado gran parte de sus cicatrices, claro que entendía. El no creía en las constumbres tontas, pero el elegir a la mejor pareja, tal vez su madre no estuviera de acuerdo, era una costumbre que estaba dispuesto a seguir, y sabía que su padre lo apoyaría, porque después de todo era una constumbre que el mismo había iniciado - bienvenido a casa - beso al pequeño alien que lo enamoró apesar de su lucha por no caer en lo mismo -

Ahora era el tercer Bat que caía por un Súper, definitivamente algo andaba mal con su familia...

FIN

Coincidencia, Destino o Costumbre?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora