Tres

4 0 0
                                    

"Mi creciente sombra me traga y se convierte en un monstruo"

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

"Mi creciente sombra me traga y se convierte en un monstruo"

-Shadow, BTS.

El viento acaricia mi piel, mi corazón se acelera, la viscosidad en mis manos me asusta, la sangre se derrama en el pasillo, la única luz se apaga y mis pies no responden a lo que mi cuerpo implora.

Trago saliva al escuchar esa voz tan suave, tan tranquila en medio de este caos.

—¡Corre! —implora con urgencia.

Sus pasos resuenan bajo el pavimento, pero capto que estos no demuestran lo que ella me pide con tanta vehemencia.

—Lakait —ruega temblando—. Ellos vienen por ti.

La luz parece oscurecerse con más fuerza detrás mío, susurros sin sentido se escuchan cerca de mí, el viento me hace estremecerse, no hay ni una sola ventana, no comprendo lo que pasa, pero mi corazón parece saber lo que mi mente aun no se percata.

Me volteo en contra de mi fuerza de voluntad, un dolor en mi pecho me implora de rodillas que solo cierre mis ojos y corra, no obedezco. La miro, a ella y el alma se me cae a los pies. Mi corazón se estruja, aun cuando sus labios no emiten palabra alguna.

—Te advertí que corrieras —confiesa con lentitud, saboreando lo impronunciable.

—Necesitaba saber —balbuceo dolido—quién era mi verdugo.

—Lo siento—niega con la cabeza—, yo no quise que comenzará así.

Las sombras me alcanzan, rodeándome, asfixiándome.

Abro mis ojos con pánico, sintiendo el corazón en mi garganta. Intento tranquilizarme, convenciéndome que fue solo una pesadilla más, pero no es cierto, yo sé quién es ella y el daño que me causo.

Escucho la alarma sonar, hasta que por fin le doy detener. Un mensaje llega de inmediato, es un numero sin registrar, sin embargo, sé a quién pertenece, debería solo borrarlo antes de tener la oportunidad de leerlo, pero me traiciono a mí mismo justificándome que esta vez puede ser diferente.

Pero nunca es diferente. Llevan distintos nombres, pero fueron culpables de una tormenta que arrastre día con día.

"Hoy es tu primer día oficial ¿verdad? Estas viviendo a costa de su vida ¿Cómo puedes ser feliz?"

Borro el mensaje.

Son las seis con cincuenta cuando mi vejiga me obliga a buscar desesperadamente un baño.

—Buenos dias, lo siento, pero ¿podrías decirme donde están los baños? —pregunto moviendo mi pierna rápidamente.

El guardia de la editorial me inspecciona con el sensor tan lentamente que juro que me orinare allí mismo. Solo cuando acaba se digna a responderme.

—Gira hacia la derecha y luego ve directo.

No le contesto en agradecimiento porque salgo corriendo apenas me dice dónde, es mi primer día no deseo ser tachado de raro precisamente hoy, suficiente con la torpeza de ayer al soltar tremenda ofensa delante de mi jefa.

No me fijo quién esta allí, hasta que acabo y escucho unas voces, y no son para mi suerte, de hombres. Maldigo incontablemente en mi cabeza, no sé que hubiera sido peor, andar orinado o ser tachado de pervertido, cuando la verdad es que ni siquiera me fije que afuera esta el dibujito que es para mujeres.

Y no deseo averiguarlo, ya solo faltan cinco minutos para las siete, no puedo llegar tarde justo hoy. Debo salir, con suerte no me prestaran atención, giro la cerradura.

—¿Cómo pudiste hacerme esto, patricia? —demanda sollozando.

—¿Yo? Ten la decencia de admitir la verdad —protesta furiosa otra voz—. Él me quería a mí y tú me lo arrebataste.

Escucho algo golpear el suelo y quebrarse, jalo la puerta cerrándola.

—Eso es mentira —balbuceo dolida—. Él me dijo que solo eras su amiga.

—Y yo que hoy iba a hacer un buen día —susurro irritado.

Me tapo la boca de inmediato, debo ser la persona con mas mala suerte en las mañanas y con una pizca de piedad pues ninguna parece haberme escuchado.

Una palmada con fuerza resuena en todo el lugar y yo sigo maldiciendo al ver que faltan dos minutos. Ruego a esa poca piedad que por favor hoy no sea el día que se agarren de los cabellos, solo atraerá gente, lo que recae en yo siendo tachado de degenerado.

Y resulta para mi asombro cuando las voces dejan de escucharse, espero en silencio veinte segundos antes de girar el cerrojo despacio. Saco la cabeza y no hay nadie, salgo contento y agradeciendo al de arriba.

—Te juro que te lo pagare —aseguro uniendo mis palmas.

Aunque no dura nada, vuelvo a maldecir al abrir mis ojos y ver en vivo y a todo color a mi jefa frunciendo el ceño.

—No es lo que parece —confieso con rapidez.

—¿Por qué tengo la sensación de que estas situaciones serán recurrentes? —cuestiona sonriendo.

—Es que es mi especialidad —acepto entre dientes—. Soy nuevo, así que no me percate que era el de mujeres.

—Digamos que es eso, por el bien de ambos —accede caminado hacia la salida—Y, por cierto, llegas tarde —dice mirándome de reojo. 

Intento responder con cualquier excusa, pero sus tacones ya se escuchan muy por delante de mí. Corro esperando que nadie este afuera.

Cuando la alcanzo me doy cuenta de su manera de vestir. Lleva un pantalón café claro y una blusa blanca combinándola con unos tacones que a mi ya me duelen solo con verla.

—No me mires tanto —declara sorprendiéndome—. Necesitas pasar por tu identificación—se detiene en frente de un mostrador—Vengo por el gafete de mi nuevo empleado —avisa firmando rápidamente un documento, de inmediato se lo alcanzan.

—Gracias —respondo avergonzado.

—De nada, Lakait...—Busca mi apellido en el objeto— Kavanagh —susurra con extrañeza dándomelo.

Gira sobre su propio eje haciendo que su cabello castaño se ondea un poco, es hermosa he de admitirlo, estaría loco si me atreviera solo a pensar lo contrario.  Camino detrás de ella y noto los dudosos que son sus pasos, se detiene de pronto, casi choco con ella haciendo que de manera inevitable observe su rostro y ella me mira a mí, pero no de la manera en que espero, está aterrada con mi presencia.

—Kavanagh.




¿Identifican el apellido?


Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: May 17, 2020 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Oscura RealidadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora