Cuando era niña agarraba lagartijas de mascota y hormigas. Pasaba horas sentada viendo hormigas pasar cargando comida y les echaba azúcar en un rincón de la casa. Cuando mis lagartos moria invitaba a mis mejores amigos al entierro de mi mascota. A las hormigas dejé de ponerles azúcar cuando picaron toda mi ropa y mi cuerpo una vez que se mudaron a mi closet.

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200tas cosas sobre mí
RandomAquí comparto doscientas cosas sobre mí, una persona común pero no ordinaria ❤ Culpen a la cuarentena.