That night at 1 A.M. (CHANSOO)

II

Kyungsoo se sentía algo mareado al despertar, pero pronto un chillido de afuera de la habitación lo hizo levantarse inmediatamente. Hyunmin estaba saltando en el sofá mientras Chanyeol intentaba atraparlo.

"Oh, Kyungsoo..." Escuchó. Mimi, la niñera de Hyunmin, ya había llegado. "¿Cómo despertó? Iba a despertarlo, pero Chanyeol me dijo que lo dejara un poco más."

"No te preocupes, Mimi. Muchas gracias." Sonrió, abriendo sus brazos para atrapar a un Hyunmin que venía corriendo hacia él. "Buenos días, Hyun-ah." Murmuró, dándole un suave beso en su frente antes de que caminaran juntos a la cocina, donde Mimi ya había preparado su desayuno.

"Chanyeol me ayudó, quiere aprender mis recetas." Se rió, haciendo sonrojar al alto.

Decir que adoraba a Mimi era poco, la mujer había llegado a su vida cuando Hyunmin apenas tenía 6 meses y Kyungsoo ya no sabía qué hacer con un bebé que no dejaba de llorar por dios sabe qué. La madre de Chanyeol sugirió a Mimi luego de que unos vecinos se mudaran y dejaran a la mujer que había cuidado de sus hijos por diez años. Mimi estuvo ahí para enseñarle todo sobre cuidar a un pequeño bebé, hacer recetas nuevas, y cómo debía volver a reinventar su vida como padre, dejar atrás la pena y seguir siendo el famoso chico de sonrisa adorable que enternecía todas las amigas del club de tejido de Mimi.

Por supuesto, como todo el mundo, Mimi adoraba a Chanyeol.

"Chanyeol me dijo que se quedará aquí por unos días, ¿debo preparar la habitación de invitados?" Preguntó Mimi, mientras servía algo de café negro en sus tazas y se sentaba junto a ellos para el desayuno.

"Uhm..." Kyungsoo volteó a mirar a Chanyeol por un momento. "Creo que será mejor dejar ese cuarto para que Chanyeollie ponga sus cosas, puede dormir en mi habitación, sería genial si pudieras dejar un juego de toallas extras en mi baño. ¿Estás de acuerdo?" Preguntó.

"Me encanta, Kyungsoo es como una manta cálida en la noche." Se burló el más alto, recibiendo un pellizco en su muslo un segundo después. "Iré por mis cosas en un rato, Minah ya debería estar en el trabajo. ¿Quieres que te pase a dejar a la compañía?"

"No, mi mánager pasará por mi aquí." Preguntó Kyungsoo, vaciando su primera taza de café del día. "Pero si puedes, ¿llevarías a Hyunmin a la guardería?"

"Ah, Hyunmin-ah, tu tío favorito te llevará a la guardería hoy." Sonrió Chanyeol, tomando a Hyunmin en brazos.

§

Ser padre y ser un cotizado actor eran cosas que no iban muy bien, por lo que Kyungsoo constantemente rechaza proyectos que involucraran grabar en otras ciudades o lugares en que no pudiera estar cerca de Hyunmin por más de dos días. Al menos hasta que estuviera seguro de que no pasaría nada con su hijo.

Después de que Hyunmin tuviera que luchar por su vida sus primeros tres meses de vida y luego tuviera que estar en constante observación siempre lo tuvo nervioso, por lo que dejó su carrera en hiatus hasta que Hyunmin cumplió un año y pasó un tiempo sin complicaciones, al menos tenía la ayuda de su familia, de Mimi, de la familia de su... fallecida esposa y la de sus amigos, en especial la de Chanyeol...

Mientras le ponían el maquillaje, no podía dejar de pensar en lo mucho que su vida había cambiado en los últimos dos años. Se hizo padre, perdió a su esposa, puso un alto a su ascendente carrera y se recuperó de una inminente depresión que a ratos parecía aun pesar. No podía sacarse de la cabeza todos los titulares sobre su pérdida, los reporteros afuera de la clínica, la presión de su familia y el tener que ser la cabeza de una familia rota.

*Mensaje de Chanyeollie*

Bajó la mirada a su celular al sentirlo vibrar y sonrió con sólo ver el mensaje que había llegado. Una fotografía de Chanyeol junto a Hyunmin en la entrada de la guardería, su pequeño hijo le tiraba un cachete a su tío favorito.

Ni siquiera tenía palabras para agradecer todo lo que Chanyeol había hecho por él en toda su vida... Sentía ese cosquilleo en su corazón que no lo dejaba respirar bien... Quería protegerlo también.

§

Al caer la noche, Kyungsoo llegó a su departamento, dejando las llaves en la mesilla junto a la puerta y quitándose sus zapatillas. Su espalda dolía por las escenas de acción que tuvo que hacer y sólo quería acostarse, pero primero... ¿No está todo demasiado silencioso?

No pudo evitar correr hacia la habitación de Hyunmin, donde su pequeño hijo dormía pacíficamente abrazado a su peluche. Se limitó a besarle su frente y arroparlo antes de salir de la habitación en dirección a la suya.

"¿Ahora Hyunmin también se porta mejor contigo que conmigo?" Sonrió al entrar a la habitación, Chanyeol estaba acostado con su guitarra y un cuadernillo a un lado.

"Bueno, soy Chaniol, el tío divertido." Sonrió, levantándose de la cama para ir a abrazar a Kyungsoo, besándole el cabello. "¿Quieres que te prepare algo de comer?"

Kyungsoo simplemente se tiró en la cama, cubriéndose su rostro con la almohada.

"No, cenamos luego de grabar. Estoy muerto." Balbuceó, sintiendo el sueño aproximarse a cada segundo.

"Sé que estás cansado, pero debes tomar una ducha... Y, debemos hablar sobre algo." La voz de Chanyeol se escuchó un poco extraña, por lo que Kyungsoo pronto se quitó la almohada de encima.

"¿Estás bien?" Preguntó, sentándose para alejar un poco el sueño.

"No es nada malo... Bueno...Luego de que fui a recoger a Hyunmin de la guardería, tuve que ir al Estudio a dejar algunos de mis instrumentos, y bueno... creo que Hyunmin tiene un talento natural con el piano..." Asintió, haciendo que Kyungsoo lo mirara fijamente antes de soltar una risita.

"Eres un tonto... Creí que había pasado algo malo." Soltó, lanzándole su almohada.

"Bueno, Minkyu hyung lo tenía en brazos mientras producía y Hyunmin estaba tocando las teclas sin saber, pero no sonaba nada mal, creo que debemos estimular su lado artístico..." Chanyeol se sentó a su lado, parecía tan serio y emocionado que Kyungsoo no podía dejar de mirarlo con una sonrisa. "¿Qué? ¿Por qué me miras así? ¿Crees que estoy loco?"

"No..." Se rió Kyungsoo antes de intentar pasar por encima de Chanyeol para ir al baño, pero el alto no iba a permitir nada de eso antes de empujarlo contra la cama. "¿Qué diablos...?"

Y así, dos hombres de 30 años comenzaron a pelear y darse golpes hasta que un tierno llanto los hizo separarse.

"Ya no estoy para esto..." Suspiró Kyungsoo, levantándose agitado de la cama para ir hacia la habitación de Hyunmin.

"¡Te gané!"

"¡Ya quisieras!"