La Vida Detrás De Las Camaras [Michael Jackson]

INICIO

Hoy era nuestro tercer aniversario, y como los anteriores, él no estaba presente.

Miro a mi alrededor, toda su familia tiene la vista en mi, mis amigos hablan y voltean a verme. Soy la comidilla de cada grupo formado en esta fiesta.

Ya no lo vuelvo a llamar, era inútil. No iba a presentarse, otra vez me dejó plantada.

—Muy bien, amigos —Todos se acercan hasta rodearme— Les agradezco mucho que hayan venido a esta reunión, Michael no pudo asistir, se retrasó el vuelo. Pueden pasar por su regalo en la mesa del fondo, gracias.

¿Alguien seguirá creyendo eso? Lo dudo, asistieron menos personas esta vez, supongo que sabían que él no vendría.

Katherine trata de acercarse a mi así que entro a la casa antes de que ella llegue. No quería tener la misma conversación de siempre, no lo soportaría. Estaba cansada.

Me encierro en la habitación, y me saco la ropa y el maquillaje. Tantas horas dedicadas para verme bien, sexy, linda y él decide no venir.

—¿Lyn? ¿Cariño, estás bien? —Janet toca la puerta— Abre por favor.

¿Para qué? ¿Para qué me diga que su hermano me ama y no va a dejarme plantada otra vez? ¿O que Michael no pudo llegar a tiempo por el tráfico de la ciudad?

¡No los quiero escuchar! Vivo oyendolo todos los días, a la hora de desayunar, almorzar y cenar. ¡No más!

—¡Vete! —Entro al baño y enciendo la ducha para no oír los gritos de mi cuñada.

¿Por qué siempre hace lo mismo? Me promete que va a llegar a tiempo y nunca lo hace, y yo como tonta siempre le creo, pero esta vez va a ser diferente.

Tres horas después:

Carl me ayuda con mis maletas, poniendo las dentro del coche. Quería irme antes de que él llegara, pero todos los empleados hacían las cosas muy despacio, para ganar tiempo. Michael los tenía controlados.

—Hey, hey —Esa voz...— ¿Qué haces?¿Qué estás haciendo?

Volteo lentamente, se baja rápidamente del coche y se acerca a Carl quien de inmediato deja de guardar mi equipaje y se va.

—¿Por qué estás haciendo esto? —Trata de tomar mis manos pero me aparto— Hey nena... ¿Amor, qué pasa?

Con solo escuchar eso mis ojos se llenan de lágrimas, eran de impotencia, de rabia.

—Perdón por no haber llegado antes, lo siento cariño ¿Podemos hablar? No te vayas. No me dejes —Toma mis manos, y las besa— Tuve un día difícil, te necesito conmigo, por favor.

No... No me convencería.

—No... Estoy harta —Me alejo y trato de subir al auto.

—Adelynn... Hablemos —Toma mi mano— Lamento muchísimo no haber estado aquí para ti, sé que prometí estarlo y sé que ya estás cansada de oírme decir siempre lo mismo, pero te prometo, amor, te prometo que no va a volver a pasar. Mira, te traje flores.

Me sonríe, se va corriendo a su coche y trae un gran ramo de rosas rojas.

—Prometo mejorar, sabes que quiero estar contigo siempre pero mi trabajo no me lo permite... —Suspiro— Me juraste estar conmigo siempre, pase lo que pase...

Era verdad, se lo había jurado, y dado mi corazón para toda la vida.

—¿Por qué no llegaste? —No quería perdonarlo tan fácilmente.

—Los fans, estuve con ellos y se me fue la hora, ya sabes como son y como soy con ellos —Me abraza y le correspondo— Feliz aniversario mi amor, te amo.

Lo abrazo más fuerte. Lo amaba tanto que a veces llegaba a asustarme.

—Que no vuelva a ocurrir —Susurro.

—Te lo prometo.

Me toma de la mano y volvemos a dentro.