• 𝐼𝑛𝑡𝑟𝑢𝑠𝑜 • 𝐇𝐨𝐩𝐞𝐕 •

-02-

~𝕋𝕒𝕖ℍ𝕪𝕦𝕟𝕘~

Durante toda la semana me encontraba de mal humor, estuve triste y evitando a todos incluso a Jennie.

Me sentía insuficiente, durante esa larga semana no pude dejar de pensar en el, en lo lindo y perfecto que era, en su sonrisa, en su voz, en su actitud, en como me hacía ver cómo una mierda, realmente detestable

-¡Es un intruso!

Grite desesperado, iba camino a casa cuando decide responder una de las tantas llamadas de Jennie, pero solo dijo

"-HoSeoki nunca me había ignorado"

No saben el dolor que sentí, la opresión mi pecho nunca había sido tan fuerte, un nudo de hizo presente en mi garganta, mi estómago se había revuelto, odiaba está sensación, por que sabía lo que significaba y no quería llorar... O al menos no en la calle, fue por eso que grité.

-¡Agh! HoSeok-

-Hablamos en tu casa, voy para allá

Y sin más colgué, realmente estaba muy molesto, pero si quería hablar sería en persona, gire a la derecha en la esquina que seguía cambiando mi trayectoria hacia la casa de mi novia

Iba tan concentrado pensando que le diría o como haría para no estallar y gritarle que no me di cuentas que había alguien frente a mi hasta que choque con el

-¡Oh! Lo siento tan...

-Descuida TaeHyung, estoy bien..

Dijo con una sonrisa, esa maldita sonrisa, ¿Porque era el? ¿Porque entre todo el mundo tenía que ser el? ¿Porque era HoSeok?

-Encerio perdón...

-Tranquilo, ¿A dónde vas?

-A casa de Jennie

-Oh ya veo

Pensé que todo terminaría ahí pero luego siguió hablando

-¿Discutieron?

-¿Que? Eh.. bueno... ¿Porque lo dices?

-Tus ojos

-¿Mis ojos?

-¡Si! Siempre tienes un brillito en tus ojos, es tan lindooo

No pude evitar sonrojarme por su comentario, además de que se había acercado juntando nuestros cuerpos y rostros

-Siempre brillan muy lindo... Pero ahora están opacos, no hay brillo...

Hizo un puchero mientras alejaba su rostro más no su cuerpo

-Ya veo...

Dije con una sonrisa un poco incómoda

-Puedo... ¿Puedo preguntar algo?

-Eh, claro, supongo

-¿Porque estás molesto?

Esa pregunta me dejó helado, la esperaba, claro, pero una cosa es esperarla y otra es escucharla. La misma sensación de hace rato volvió, la opresión en el pecho, el estómago revuelto y el estúpido nudo en la garganta. Aunque, ahora había algo más, no se que era o porque lo sentía, pero la mirada preocupada de HoSeok fue el detonante, sin quererlo comenzé a llorar

Las lágrimas caían sin control, el nudo ahora dolía, tape con mis manos mi rostro y sentí mis piernas temblar por la impotencia de llorar en un lugar público, antes de ponerme en cuclillas unos brazos me rodearon, me sorprendi pues sabía que esos brazos eran de HoSeok, las lágrimas no se detenían por más que quería