Jungkook llevo múltiples mujeres y hombres a su casa con el fin de buscar una buena persona para sus hijos y un buen polvo claro,siendo casi expulsados por sus propios hijos.
Y Kim Taehyung no será la excepción pero lo intentará.
"Son unos niños, J...
Jungkook comenzó a llenarse de pensamientos mientras comía lentamente del almuerzo que Taehyung preparó a petición de Eun que fue pasta con albóndigas.
Si se comparaba entendía porque Jimin era un niño feliz.
Jimin recibía amor y cariño por donde quiera que mirase por otro lado sus hijos siempre convivieron con gente fría incluyéndose. Quizás su esposa no era muy demostrativa con sus hijos antes de morir pero lo intentaba por ellos después falleció y el no sabía como tratar a un niño hasta que Taehyung le lleno la vida de colores y amor, se fue soltando comenzando con nombres tiernos para sus hijos.
-Papá,ya no quiero.-Dice Eun mirando a Taehyung por accidente pensando que era su padre.
Jungkook sale de su trance y mira el rostro de Eun rojo.
-Lo siento.-Jungkook lo mira confundido.
-No hay problema.-Le sonríe Taehyung limpiandole las mejillas llenas de salsa de tomate.
-Papi, yo también estoy rancharo.-Dice Jimin un poco celoso del otro niño.
-Listo.-Taehyung termino de limpiar a Jimin.
-¿Papá.?-Eun llamó a Jungkook.
-¿Uh? Dime.
-Ya no quiero.-Jungkook mira el plato y comió casi todo.-¿Puedo ir a jugar?
-Si, no brinques mucho que te puedes vomitar.-Eun asintió dejando el plato en la mesa e irse.
-Papá.-Susurra Seo que se encontraba a un lado y este lo mira.-Quiero otra.-Dice apuntando la albóndiga
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