¿infiel?

Fiesta

Me llamo Jin, trabajo desde hace un año en la barra de el bar "Moon", personalmente me gusta estar aquí, no solo se trata de mezclar bebidas a lo bestia, yo considero que es como un arte.
La noche de hoy no es tan agitada como creí, los hombres que rentaron el bar para una despedida de soltero están más entretenidos en las bailarinas que en pedir un buen trago. Platico con mi amigo Jimin sobre el chico nuevo de seguridad, nos dieron permiso de salir a las 12:00 am, aún faltaba media hora y yo ya me estaba aburriendo hasta que llegó un chico moreno a la barra.

-¿Qué te puedo ofrecer?- pregunto sonriente.

- Solo dame un whisky por favor- contesto cansado.

- Vaya fiesta ¿No cree?- le entrego su bebida apoyo mis codos en la barra.

- Muy aburrida para mí gusto, me llamo Namjoon ¿y tú?- dio un sorbo a su bebida y me miró.

- Seok Jin señor- sonrió leve.

-¿Parezco señor? Vamos, si acaso te llevo 3 años- rio mostrando su hoyuelos, era lindo.

- Ok Nam ¿Que tan afortunado crees que sea el novio?- empecé a platicar con el, era alguien atractivo no iba a perder la oportunidad de coquetear con alguien como él.

- No mucho- miró su bebida como pensando en algo- en fin, quieres salir esto me está fastidiando- tomo mi mano.

- Salgo en 10 minutos pero no creo que haya problema- lo mire y sonreí coqueto- solo deja me cambio el uniforme.

- Te espero afuera- lo vi alejarse.

No se porque voy a salir con una persona de la cual solo conozco su nombre, era demasiado sexy y yo no tengo nada que hacer está noche, además ¿Qué podría pasar? Me despido de Jimin sin dar tantas explicaciones y salgo en busca del moreno, lo veo recargado en su coche y me acerco a él.

- Te parece si vamos a tu casa, la mía tiene cosas de los novios- dice y toma mis manos.

- Ok ¿Puedo conducir yo?- pregunte tierno. El ni siquiera dudo y me dio las llaves, es mucha confianza... Me gusta.
Conduje a mi casa el camino fue rápido, no vivo muy lejos, bajamos y entramos a mi casa, era pequeña pero yo no necesito mucho espacio, cuelgo mi sudadera y cuando me doy la vuelta siento sus labios apretando los míos, no puse resistencia, coloque mis manos alrededor de su cuello, me tomo de la cintura y me apego más a el, para que resistirme si en realidad quería hacer esto.

- Aquí va a ser muy incómodo, vamos a mi habitación- dije separándome de el, a lo cual el asintió y me siguió.
Caminamos un poco y abrí la puerta de mi recámara, tan rápido como entramos me empujó a la cama y continuo besándome desesperadamente.

- ¿Vives solo?- pregunto separándose un poco.

- Si- dije un poco agitado.
Fue lo último que dijimos, volvimos a juntar nuestras bocas y se deshice de mi playera y pantalones dejándome en ropa interior, empezo a besar, morder y succionar un poco de mi piel desde mi cuello hasta llegar al borde de mi ropa interior donde podía apreciar a mi miembro ya excitado, se levantó y me miró fíjamente para después el empezar a quitar su ropa, yo lo veía maravillado, no era mi primera vez pero si era la primera vez que veía un cuerpo tan marcado como el de él, aún no se quitaba pantalón y ya se notaba su erección pidiendo ser liberada, quitó sus pantalones, se acerco nuevamente a mí para enseñarme 3 de sus dedos, como si nos comunicaramos telepaticamente abrí mi boca para que el los introdujera, los lamí mirandolo a los ojos y él hacía pequeñas expresiones de placer, saco su dedos quitó mi ropa interior he introdujo dos de sus dedos en mi, solté un leve gemido a lo que el sonrió, empezó a moverlos en círculos y como si fueran tijeras, apreté un poco las sábanas soltando jadeos por el placer que sentía, introdujo el último dedo dando lentas pero fuertes embestidas, en cada una soltaba un gemido agudo, cuando estuve lo suficientemente dilatado saco sus dedos, quitó su boxer dejando ver su exitado y necesitado miembro, me puso boca abajo se posiciono en mi entrada para después acercarce a mi oído.

- Está noche nunca la vas a olvidar- susurro en mi oído con la voz un poco ronca.
Dicho esto se introdujo en mi de golpe, solté un fuerte gemido de placer y dolor sin embargo espero a que me acostumbrara, una vez que empecé a mover mis caderas en busca de más contacto, el también empiezo con un leve vaivén, apesar de que me estaba acostumbrando su miembro era demasiado grande para mí.

- E-estás muy a-apretado J-Jin- escuchar mi nombre entrecortado de placer me fascinó hasta que salió de mi para ponerme boca arriba- quiero verte y oírte gemir mi nombre- dijo con la voz ronca, tenía pequeñas perlas de sudor que se veían sexys en su bronceada piel, volvió a introducirse en mi y dio embestidas fuertes.

- A-ah~ Nam~ m-más~ ahh~- dije de forma aguda, él aumento el ritmo de las embestidas tocando mi punto en varias ocasiones.
Subió mi pierna en su hombro y continuo con la misma velocidad pero ahora era más profundo.
Tome mi miembro y lo comencé a masturbar, quien iba a pensar que un extraño sería tan bueno en la cama, los gemidos, jadeos y choques de nuestras pieles era lo que llenaba la habitación, nos unimos en un beso en el cual recorrió toda mi vanidad bucal con su lengua, entre aquel beso mi cuerpo no resistió más y me corrí en mi abdomen y el de él, separamos nuestras bocas.

- J-Jin~ me vengo~ mmh...- me dijo empezando a sacar su miembro.

- N-no~... Ahh~ Nam... Lle-llename~- suplique tomándolo de los brazos, segundos después lo sentí llenándome completamente.
Nam se tumbo encima de mi, ambos tratamos de regular nuestras respiraciones, una vez más tranquilos saque unos pañuelos de la mesita de noche de aun lado de mi cama y nos limpié.

- Tenías razón...- Nam me miró extrañado- nunca voy a olvidar está noche jiji- reí leve.

- Ven aquí, vamos a descansar- me abrazo por la cintura y nos acomodamos debajo de las sábanas, su teléfono estaba vibrando en el piso dentro de el bolso de su pantalón.

- ¿No estarán preocupados tus amigos de la fiesta?- pregunte acomodandome en su pecho.

- Tal vez...- se estaba quedando dormido- mañana me verán en la boda, no te preocupes...- dijo par quedarse dormido.
Lo admiré unos segundos pero el sueño me llamaba y termine cediendo.

8:45 am

Mi alarma empezo a sonar despertándome, abro mis ojos para encontrarme con los ojos de Nam viéndome fijamente, sonrió mostrando su hoyuelos.

- Buenos días pequeño- deposito un beso corto en mis labios.

- Buenos días...- reí y acaricie su mejilla.

- ¿Descansaste?- asentí- vamos a desayunar a algún lado ¿Si?- colocó su mano sobre la mía.

- Está bien pero a ¿Si llegas a la boda de tu amigo?- pregunte preocupado.

- No es la boda de mi amigo jajaja- se burló, a lo cual lo mire extrañado- es mi boda, pero ahora me has hecho preguntarme si debería casarme...

Hola, soy nueva aquí, todas mis historias están en un cuaderno hechas a mano solo la empezaré a publicar aquí, perdonen mis faltas de ortografía, espero me apoyen y recomienden.
Besos 😘♥️