🌠Cap 9: Acostumbrándose🌠

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Narra _____:
Miraba cómo se pasaban las horas hasta dar las 8:00 a.m. Y la verdad no me interesa la idea de salir de mi cuarto, escuchaba cómo caminaban por el pasillo y la verdad estaba nerviosa por el simple hecho que ahora tengo una apariencia ventrexiana pero supongo que tarde o temprano tendré que salir a comer o entrenar o darme un baño.

-No quiero saliiiiiir —con un puchero me levanté de la cama y me puse mi respectivo atuendo normal.

Una blusa negra ajustada con unos jeans azul oscuro, una chaqueta negra, mis botas celestes, mi cinturón con armas y mis brazaletes los cuales construí y suspire antes de salir de mi habitación.

-Vamos... Ni que jamás hubieran visto a una humana mitad ventrexiana que se hizo ventrexiana de la noche a la mañana —fingí una sonrisa y salí en dirección a la cocina y tomé una galleta.

-¡¡Quiero más galletas HUE!! —el rubio gritaba al Ia mientras masticaba más galletas.

-Ya te lo había informado, Gary... Has comido suficientes galletas por hoy.

-Deberías darle al menos una más y ya HUE —miré el techo y di un mordisco a la galleta que tenía.

-Ves!? Hasta _____ sabe que tengo--AAAAAAAHHHHHHHHHHH!!! SANTA MADRE DEL SEÑOR QUE TE PASO!!??? —me tapé los oídos por el tremendo y agudo grito que dio el rubio.

-¡¡No grites que harás que mis oídos sangre Gary!! —refuté con molestia mientras cubría mis orejas agachada.

-Te ves como Avocato y Cato-araña —yo sólo me encogí de hombros.

-¿Por qué carajos gritan tanto? —llegó Avocato con Pequeño Cato los cuales se me quedaron mirando en shock.

-Bueno bueno... Si me disculpan me iré para que no pregunten sobre esto —me señalé a mi misma —ni sobre eso —señalé el techo en el cual estaba pegado KVN.

Yo sólo me fui con mi galleta en mano mientras caminaba por los pasillos aunque escuché que alguien se dirigía hacia mí.

-Oye _____! —me alcanzó Cato y bajé un poco el ritmo.

-Si Cato? —lo miré con una sonrisa —¿ocurre algo?

-No es sólo que... Te ves como una verdadera ventrexiana —¿qué? ¿Acaso no lo era antes?

-Ah... Eh pues sí —eso dolió —es por que intenté curarme las grietas que tenía en la piel —reí un poco nerviosa.

-Oh que genial —me miraba examinando me de pies a cabeza, al parecer le sorprendió mucho —¿pero... que tiene que ver tu método de curación con tu aspecto?

-Es difícil de decir en realidad... Ni yo lo sé —me rasque la mejilla algo nerviosa por la pregunta —te... ¿Te gusta como me veo? —pregunté mirando enfrente.

-Eh? Pues... Sí, se te ve bien —se volteó a otro lado, me imagino que se sonrojó por la pregunta.

-Vale tengo que practicar puntería con mi ~~~~ adiós Cato kawaii —le di un leve golpe en el brazo y me fui caminando a otro lugar dejándolo sin mirar atrás, di la vuelta y suspire totalmente nerviosa —¿Q-qué me está pasando?... Me siento nerviosa y siento arder mis mejillas... Jamás me había sentido así...

-Esas son claras señales de sentimientos amorosos hacia cierta persona, la cual es Pequeño Cato.

-HUE!! Shhhhh!!! —no quería que los demás escuchasen eso —¿¡no podrías ser discreto!?

-Nel (xD)

-Como sea... Este efecto no es duradero, no me siento de humor HUE así que... Podrías decirles tú lo del explosivo?

-De acuerdo... Pero ve a reparar el hoyo que hiciste para sacar el explosivo.

Yo sólo asentí y me fui del lugar.

[.... ]

-Creo que debería dejar de hacer huecos en esta nave —mencioné algo molesta mientras terminaba de soldar el repuesto de hierro en el hueco.

Estaba concentrada en reparar ese hueco pero un abrazo me tomó por sorpresa y miré a quien me estaba abrazando.

-HUE nos dijo lo que hiciste cuando me rescataron... —solté la herramienta y lo abracé bien.

-Te dije que te ayudaría a volver con tu papá —le dije con sinceridad y con una sonrisa tierna a lo cual se sonrojó.

-Jeje... Te debo una en grande —se separó y se fue aunque vi que Avocato se acercaba con su semblante serio, valla que tenía nervios de haber hecho alguna pendejada.

-Eh... Hola Avocato —lo miré y agache las orejas nerviosa.

-Escucha... Sé que tuvimos nuestras diferencias en el pasado —sólo me digne a asentir —pero... El que hayas evitado que mi hijo muriera... Eso enserio te lo agradezco —me revolvió el cabello y yo reí un poco —gracias _____ —se fue.

Valla, que haya dicho gracias Avocato enserio es mucho que decir, él no suele dar gracias y eso lo sé por experiencias pasadas... Me alegra que ya todo esté bien a pesar del pasado.

-Listo! —me crucé de brazos con una mirada de satisfacción al ver aquel hueco reparado.

-_____.

-¿Si HUE? —miraba el hueco ya reparado y luego al techo.

-¿Cómo supiste en que momento lanzar el explosivo?

-Intuición supongo —me crucé de brazos pensando pero un pitido en mi brazalete metálico me llamó la atención —uh? —presioné en botón dejando ver quien me llamaba.

-¿Crees que te has salido con la tuya _____? —oh no... Era el Sr Comandante.

-Si, enano cara de ano —el se enfureció por lo que dije a lo cual reí.

-Aún tengo tu vida en mis manos —mencionó de manera siniestra apretando su puño con fuerza.

-Agh! —caí de rodillas con una mano en mi pecho, sentía demasiado dolor.

-Ahora... Si no quieres morir... Entrega a E-351 y a todo el que esté en el Galaxia 1 —lo miré con furia.

-Eso jamás... Prefiero morir.

La llamada se colgó... Ahora sé lo que se viene... Se viene la guerra.

⭐MI AVENTURA⭐[Final Space Y Tú] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora