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❯Soft ❯fluff
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Felix llama a la puerta del dormitorio de Chan, es suave y silencioso a diferencia de sus golpes habituales. Chan lo notó y rápidamente se levanto para abrir, se encontró con un niño triste, cuyos ojos habían caído y habían perdido la luz en ellos. Chan sintió que su corazón se hundía, sus cejas se fruncían en preocupaciones.
"Chan ... puedo entrar ...?" La voz de Lix era ronca y temblorosa, como si hubiera estado llorando. Chan tomo sus manos y lo llevo a su habitación. Se sentaron al borde de su cama juntos, todavía tomados de la mano. "¿Qué pasa?"
Silencio. Felix evito los ojos de Chan.
Pasaron los minutos y Felix abrazo a Chan en un fuerte abrazo, tomándolo por sorpresa. Le devolvió el abrazo, y con las diferencias de su peso, habían caído de posición anterior ahora para acostarse juntos. Lix aprovecho la oportunidad para apoyar su cara en el pecho de Chan, y Chan descanso su barbilla encima de el, frotaba su espalda en círculos mientras acariciaba su cabello. "No tienes que decirme ahora, ¿de acuerdo?" Chan besó su cabeza.
"Te amo." Felix hablo, su cuerpo temblando ligeramente mientras sofocaba sus sollozos.
