Capitulo 2

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Me levante y camine hacia la cocina, donde me prepare un cafe con leche y nutella, sali a tomarmelo a lka terraza, era precioso, poder ver el mar desde alli, tambien habia una terraza en frente de la mia, separada por un muro, pero se podia saltar facilmente, supongo que alli viviria mi vecino, un tal...Craco...Draco...Si eso era, Draco Malfoy.

Por eso me habia comprado la casa alli, por que el antiguo dueño de la casa no se llevaba bien con ese Draco Malfoy, a mi particularmente me daba igual, yo seguiria haciendo mis sueños realida, viviria alli, seria feliz, y quien sabe las aventuras que me ocurririan, me sente en la barandilla de piedra de la terraza, mientras el viento movia mi pelo y yo observaba el mar sujetando la taza con mis manos.

Aquello era precioso, estar ahi, tranquila, observando el horizonte, definitivamente ese era mi sitio, ahi si que podria estar yo agusto, sin problemas, sin nadie a quien dar explicaciones, si es verdad que estaba sola pero...¿Y que? ¿Que mas daba? Yo sabia vivir perfectamente sola, ademas mas o menos me controlaba, y si no ya encontraria a alguien que ejerciera de conciencia, como lo habia hecho siempre blanca, por unos momentos pense en ella, ella si que era mi mejor amiga, sabia hacerme reaccionar, cuales eran mis debilidades, y me conocia, con ella no hacia falta fingir en ningun momento, solo tenia que ser yo, y esa era la unica razon por la que estuve a punto de no venir aqui, pero ella me animo tan feliz, tan sonriente, no podia...ella sabia que si yo me quedaba alli no seria feliz, y por eso decidio que unos Kilometros no nos harian daño.

-¿Eres la nueva vecina?

Me sobresalte un poco y gire la cabeza y vi a un chico de color, con los pomulos marcados de pelo negro y ojos marrones inclinados, me miraba u tanto extrañado pero su mirada me transmitia tranquilidad, le dirigi mi sonrisa mas dulce y le conteste.

-Si soy yo, y tu eres...

-Zabini, Blaise Zabini.

-¿Que te crees James Bod?

-¿Quien?- me pregunto un tanto extrañado

-Nadie, da igual- musite- ¿Tu eres el dueño de la casa?- le pregunte con cara de interrogacion.

-No, que va soy... un amigo del dueño de la casa.

-Amm...

-¿Te gustaria pasar a ver la casa?- me pregunto sonriente.

-Vale- dije al tiempo que me levantaba- Por cierto soy Mel.

-Es un placer Mel, pero creo que antes de venir deberias cambiarte- me dijo sonriendo.

Baje la mirada y me dic uenta de que llevaba una camisa azul que apenas me tapaba las bragas rosas, llevaba las mangas remangadas, me sonroje rapidamente, asenti con la cabez y sali pitando con la taza en la mano.

La deje en el comedor, me di una ducha rapida, me recogi el pelo en un moño mal echo pero que por lo menos no me ponia los pelos en la cara, me puse una camiseta roja de manga corta, con un peto vaquero corto, pero sin ponerme los tirantes, unas medias transparentes y unas converse rojas, me retoque con un toque de rimel, un poco de base para tapar las imperfecciones y una barra de labios rosita suave, que apenas se notaba.

Cogi el movil y sali de alli cerrando la puerta camine lentamente y llame al timbre, oi como alguien soltaba un fuerte taco y Zabini me abrio la puerta riendose, me di cuenta de que estaba en pijama y sin parte de arriba, estaba musculoso claro, pero eso no era lo que me atraia era una cicatriz que llevaba en su brazo, tenia pinta de ser un tatuaje borrado con laser-Ahi las fiestas que malas son- me dije a mi misma, como si me hubiera leido la mente este se rio.

-Pasa Mel, no te quedes en la puerta ¿Quieres tomar algo?-me pregunto amablemente.

-No gracias, como ya abras visto ya he desayunado pero gracias- le respondi con una sonrisa.

Como aire al respirar...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora