。゜。゜。゜。

2.3K 181 76
                                    

Negué con la cabeza y me cubrí la boca. Sentía las lágrimas venir. Empujé el brazo de Liam.

"¡No!" Grité y abrí la puerta. Corrí y corrí, simplemente empujando a cualquier persona con la que tuviera contacto. Corrí a nuestro puente. El puente al que siempre acudíamos cuando estábamos tristes, felices o, simplemente necesitábamos pensar. Nuestro puente. Corrí y me detuve cuando lo miré.

"Harry." Susurré y, poco a poco, arrastré mis pies pesados hasta el objeto brillante en el suelo y caí de rodillas. Cogí el collar con el avión de plata y sollozé.

Miré a mi alrededor, esperando, sólo esperando, que Harry estuviera aquí, por alguna parte. Suspiré y caminé por el borde del puente. Sentí el aire frío y brumoso golpeándome.

"Harold." Susurré y agarré el borde del puente. Cerré los ojos y sentí el aire frío en mi cara. Sonreí, por primera vez esa semana.

"Louis, detente." Se quejó el chico más joven frente a mí. Me reí y sacudí la cabeza. Cogí un trozo de su cabello y lo puse entre medio de las dos barras de metal. Llevé la plancha hacia abajo y escuché el quejido del chico. Reí y me alejé de mi creación.

"Wow, te ves linda." Le sonreí y él juguetonamente empujó mi hombro. Se dio la vuelta y vi como sus hermosos ojos verdes se abrieron. "Tú, pequeño hijo de puta" gritó. Y se lanzó hacia mí. Nos tropezamos con el azulejo del baño, y nos reímos. Besé sus labios suavemente.

"Pareces una mujer." Susurré y una sonrisa descarada apareció.

 "Soy una mujer bonita?" dijo, citando a Bob Esponja. Rodé los ojos y me senté. Rápidamente, me empujó contra el suelo de baldosas y gemí. El azulejo estaba frío contra mi espalda desnuda. "Respóndeme." gruñó y yo sonreí. Él sonrió también. Y se sentó a horcajadas en cintura.

 "Mmm, no estoy muy seguro. Las chicas no son realmente mi tipo." Dije. Él sonrió.

Se inclinó y me besó en los labios suavemente. Gemí contra la fuerza de sus labios, pasé la mano por su -ahora- lacio cabello.

"Entonces, ¿cuál es tu tipo?" dijo contra mis labios. Me reí, y tiré de su cuerpo, para tenerlo más cerca del mío. Él mordisqueó mi labio. Yo gemí. "Harry, si muerdes más duro, me vas a arrancar el labio."

Él sonrió y alzó una ceja. "¿Eso es un reto?" Reí y sacudí mi cabeza.

"Tal vez debería alisarte el cabello con más frecuencia, si eso hace que te comportes como un descarado." Dije, e hizo un puchero, probablemente recordando el desastre que le había hecho a su cabello.

"Bebé, yo siempre he sido un descarado." Él sonrió y besé sus labios.

Eso es lo que él era. Un descarado. Tal vez eran los hoyuelos, también. O los rizos. O esa risa estroundosa por la cual no podías hacer nada, sólo sonreír junto con él. Pero, desde hoy, ya no sería capaz de oírla nunca más.

Caminé por el puente, sólo mirando hacia el agua. Sólo recordando todo. Imaginaba toda la presión que Harry debió estar pasando. La vida era un milagro. Harry sabía eso muy bien. Siempre voy a estar seguro de eso. Que la vida era algo que no todo el mundo es capaz de presenciar. Él tenía un gran corazón. Ayudó a los demás tanto como pudo.

Como aquella vez: cuando celebramos el "Día de la Nariz Roja". Estábamos todos, pero yo no le presté mucha atención a los demás. Tuve que ver al pobre muchacho rizado, a quien amo, llorar. Y yo no podía incluso ir a consolarlo. Habían muchas cámaras y, podrían habernos visto.

Los chistes que compartimos. Todas las bromas que teníamos, día con día. Ahora estaban ocultas en mí. Yo era el único que iba a sonreír cada vez que sucediera algo. ¿En quién, se suponía, que debía confiar ahora? El mundo había tomado una gran parte de mí. Y fue, el que una vez llamé, alma gemela.

selcouth ✧ louis + harryDonde viven las historias. Descúbrelo ahora