prologo

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Investigación carroñeros infectados.
Doctor Bernard boll

Dia 1: Le hemos inyectado patogenos y microbios a la primera evidencia. Objetivo?: crear homunculo biologico para poner a prueba los gases.

Dia 2: Los patogenos y los microbios no hacen efecto en la evidencia. Prueba fallida.

Intento 2
Dia 3: Hemos modificado la evidencia, pero ha muerto, avanzamos poco a poco, y cada vez tenemos mas información.

Intento 3
Dia 4: al agregar cianuro, la evidencia a muerto a las 14 horas... seguimos intentando.

Intento 4
Dia 5: La cosa ha mejorado al poner gases hechos a partir de microparticulas de agua hirviendo.

Dia 6: Todavia no pasa nada, pero estudiamos cada cambio.

Dia 7: luego de 48 horas, la evidencia a muerto.

Conclucion de la investigacion de la semana:

- El agua mantiene viva la evidencia.

Semana 2

Dia 8: Al agregar microparticulas de ceniza y basa fria, la evidencia ha muerto casi de inmediato. Eso es una buena pista...

Intento 5
Dia 9: le inyectamos a la evidencia los restos de las otra evidencias que murieron en intentos anteriores. Se ha formado un ser vivo, lo logramos.

Conclusión: una mezcla hizo de la evidencia una metamorfosis importante, que ha creado una especie de invertebrado. Parecido a un gusano...

Acto 1: Dispersados

Capitulo 1

Bitter acababa de cumplir los 13 años, y, como siempre, salio a buscar algo de comida. No era que siempre tenia suerte, pero, era su cumpleaños, que podia pasar?
Bajo las desvastadas escaleras de su departamento. Conocia cada escalon como la palma de su mano. La madera lijada (ahora llena de sangre) y el escalon roto. Claro que se habia acostumbrado a caerse en el. Hacer tanto ruido para atraer esas cosas... Fue a la planta baja de su edificio de 3 pisos. Era un buen hogar, claro que era mejor que estar afuera, solo, con hambre. Aunque siempre tenia hambre. Solo un almacen, que quedaba a dos cuadras de su departamento lo mantenia con vida. La comida enlatada abundaba, y no la traia todo solo porque no podia, o porque haria ruido. Siempre se imaginaba que pasaria si saquearan el kiosko, pero siempre se rehusaba a pensar en ello. Y, ahora la parte mas difícil. Salir. El pueblo se habia llenado de las cosas, por un extraño y extravagante sonido de una pistola. Era toda una horda, pero era agil. No era muy sigiloso, ya que lo vencía el equilibrio. Mientras esquivaba a las cosas y corria pensaba si algun dia podria salir de ahi. Con su pistola en alto y muy atento, vió el almacén desde unos 20 metros. Estaba oscuro, claro que no habia luz eléctrica, y el dia nublado no ayudaba. Ya no podia darse el lujo de evadir comida, asi que se metio en las penumbras en busca de comida. El hambre era tanto que no pensaba, ni tenia miedo. Nunca tenia miedo. Si algo le habian enseñado durante 13 años de su vida era no tener miedo. Era algo inutil y estupido, totalmente innecesario. El miedo era para debiles.
Tomó dos latas de comida, y volvio a su guarida.
Esa noche durmio tranquilo, casi como siempre. Obvio que uno nunca puede dormir tranquilo con esos muertos vivientes tocando la puerta de tu casa. Pero nunca pasaba algo importante, interesante. El unico suceso maso menos interesante fue el disparo, aunque es cuestión de acostumbrarse a escuchar disparos de la nada. Penso y penso, hasta que concilió el sueño...
Se desperto sobresaltado al escuchar estruendos en la parte baja de su departamento. Eran pistolas, llegó a diferenciar algunas ametralladoras. Eran demasiados. Se atrinchero debajo de una mesa, saco su pistola y apunta a la unica entrada de su humilde y temporal hogar.
- Vamos Quite, no seas idiota, ¿crees que habra ALGO en este edificio?, hace un maldito año que de pedo sigue en pie y tu quieres revisar...exclamo quejandose de manera explícita. - CALLATE MALDITO IDIOTA, QUE NO ENTIENDES QUE DESDE QUE MATE AL HIJO DE PERRA DE BEN YO ESTOY A CARGO?- Exclamo vociferando
alguien, seguido de un tiro estruendoso, que dejo callado a todo aquel que estuviera en ese olvidado terreno. - Vamos arriba manga de imbeciles-
Ahí, los nervios de bitter explotaron, sentia su transpiracion caer en su cien, sentia los ruidos de los escalones, sus manos ya no podian sostener el arma, estaban resbaladizas, sus pupilas se dilataron y su hermosa cara de niño se trasformo en la cara de un niño perturbado... Se escucho como un escalon se quebraba. CRACKK. Seguido de el ruido de alguien cayendose por el vacio de 20 metros al suelo. Se escucho otro crack mas lejano, desde abajo. Bitter imagino sus huesos quebrandose. Claro y obviamente, fue el escalon roto que el esquivaba sin la mayor dificultad. Sabia que estaba lidiando con gente mala, pero estupida. La puerta de su habitacion se habio de golpe por una patada. Y ahi los vio. Primero entro alguien barbudo, con una chaqueta de cuero negra, pero llena de trozos de algun cuerpo humano. Tenia unos jeans azules rotos, tambien con sangre, y unos borseguines en los pies. Tenia una pala en la mano, claro, llena de sangre. A continuación salieron dos tipos, con apariencia de bandidos, asesinos, mercenarios. Sus caras los describian tal como eran. Sus dos guardespaldas tenian dos ametralladoras.
- Niño, no te asustes- dijo con una sonrisa tetrica, turbia y malvada.
-Quieto o disparo, creeme, yo tambien tuve que matar gente por defensa propia, y esta no va a ser una excepción- dijo con firmeza
- jajajjajajajaj, enserio, tu no me conoces pendejo arrogante- un guardespaldas se adelanto al desconocido lider, pero Bitter fue mas rapido, fue todo en un solo segundo. Apunto de inmediato al hombre y apreto el gatillo sin dudarlo. Cerro los ojos rapidamente, para no tener que ver lo que habia hecho, un ruido lo aturdio. Hasta que todo pasó. Cuando los abrió, vio el cuerpo tirado del desconocido. Rapidamente, el lider llevó su pala arriba, y con toda la fuerza que tenia, la blandio de tal forma que le pego en un costado de la cara. Nunca bitter sabria el dolor de un parto, ni de una atropellada... Pero el horroroso dolor de su ojo desgarrandose por una pala nunca lo olvidaria...

Supervivencia Al Parasito. - ZombisDonde viven las historias. Descúbrelo ahora