Cómo Enamorar A Tu Enemigo Y Salir Sin Un Rasguño

Sé mío

Jhon
Cielo y yo seguimos practicando juntos, boxeando y hablando en alemán, es una chica muy agradable, nunca me lo hubiera imaginado, incluso se ha ofrecido a enseñarme a cocinar

-Segura que está bien poner tanto picante?

Inquiero verdaderamente dudoso al verla añadir un montón de chiles a la salsa que prepara

-Si, si, tranquilo

Me dice con una sonrisa burlesca, es algo característico de ella, yo también le sonrió, aunque es más bien una sonrisa apenada, si algo he aprendido de esta casa es que adoran el picante, y yo apenas si puedo tolerarlo, es por eso que todos los días preparo aparte una ensalada, ahora me encuentro picando zanahorias

-Hey Jhon
-¿Humm?
-¿Alguna vez has estado en Alemania?
-No aún
-¿y como es que lo hablas tan bien?
-Mi padre era aleman y aunque él murió cuando era niño mamá quiso que conservara esa parte de él y me llevó a clases particulares
-Creia que tu padre era estadounidense

Apriero mi mandibula molesto y comienzo a rebanar más rápido y más fuerte

-No, no, el esposo de mi madre es estadounidense, mi padre era alemán
-Ya veo

Se queda callada, creo que debió de notar que es un tema que me molesta

-Jhon...
-Dime
-¿te gustaría conocer alemania?
-Si, algún día
-Jhon...¡Se mío!

¿Qué? Dejo de picar las zanahorias para mirarla directamente

-¿Qué?

Ella a veces habla de una forma incorrecta

-Que seas el mío, mi traductor en Alemania

....

Hola mis queridas 2 lectoras! ¿Me extrañaron? ¿No? Buuu...  como sea, creo que tengo que disculparme por dejar esta historia por tanto tiempo, la verdad no me acordaba de ella jeje y a decir verdad no estoy muy segura de que estoy haciendo, no recuerdo la trama que quería seguir, tal vez esite unos cuantos detalles aquí y allá, ya veremos qué pasa.