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El lugar se volvió silencioso en cuanto sus amigos se marcharon con los otros chicos, los nervios de Jimin aumentaron el triple, la confianza que tenía la noche anterior se esfumó en cuanto quedó solo.

El pelinegro seguía en lo suyo limpiando el área y esas cosas, se veía jodidamente guapo, tanto que se quedó embobado observándole, no se dio cuenta hasta que un pecho sólido quedó frente a él y una risa nasal se filtró por sus oídos.

—¿Quieres que empecemos ahora? -su voz se escuchaba más ronca que hace un rato y eso hizo estremecer a Jimin.

—P-pero no te burles de mi, me dan miedo las agujas, un poquito nada más -su voz salió temblorosa por la presencia del pelinegro.

—No te preocupes, bonito -una sonrisa surco sus labios- yo te cuido.

—No te preocupes, bonito -una sonrisa surco sus labios- yo te cuido

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Tinta 국민 Kookmin Mini AUDonde viven las historias. Descúbrelo ahora