Me despertó la dichosa alarma recordándome que el verano ya había acabado. Fui a apagarla como de costumbre para poder seguir durmiendo cuando mi pesado hermano entró por la puerta.
-Buenos días hermanita. Despierta que llegaremos tarde y hoy es el primer día de clase- dijo emocionado.
-Buenos serán para ti- dije- y esa es la intención. ¿Nunca te han dicho que lo bueno se hace esperar?- murmuré girándome hacia el otro lado con ánimos de seguir durmiendo cuando noté que me empujó y me tiró de la cama.
-¡Mario!- grité furiosa- ¿no podías ser más cuidadoso? Me vas a romper algo. Eres un bestia.
-La próxima vez me harás caso cuando te diga que te levantes- soltó una carcajada maligna y salió de mi habitación satisfecho al ver que me levantaba y me dirigía hacia el baño.
Antes de entrar al baño a arreglarme para ir al instituto sin parecer un zombie, cogí mi móvil y ví que Hannah y Débora me habían escrito.
Débora 6:45 a.m.
Oye, ni se te ocurra llegar tarde, que te conocemos. Te quiero aquí bien puntual o yo misma iré a buscarte.Hannah 6:48 a.m.
Estoy totalmente de acuerdo. Iremos a por ti y no pienso tener ningún cuidado cuando te agarremos para meterte en el coche.Yo 6:51 a.m
Está bien, está bien. Parece que vuestras amenazas han sido efectivas porque ya estoy aquí en la puerta, pero no os veo. ¿Quienes son las que llegan tarde ahora, eh?Cuando llegaron fui corriendo hacia ellas y les di un gran abrazo. Débora se había pasado todo el verano en Francia, en la casa de su padre, y Hannah había estado de campamento, por lo que llevaba más de dos meses sin verlas.
-Os he echado muchísimo de menos chicas- dije emocionada.
-Y nosotras a ti- dijeron al unísono, cosa que nos hizo reír.
-Bueno, y cuéntanos, ¿qué tal vas intentando conquistar a Noland?-preguntó Débora inocentemente.
-Argh ni me lo recuerdes. Por más que intento lanzarle indirectas no las capta y al final siempre termino quedando en ridículo. Por no hablar de que cada vez que hablo con él tartamudeo más que el cerdo de los Looney Tunes.
Se echaron a reír eufóricamente y pararon de golpe al ver que mis ojos comenzaban a brillar. Noland venía hacia nosotras. Finn, Adam y un chico que no reconocía le acompañaban. No les estaba prestando atención a los demás.No le podía quitar los ojos de encima, y él lo sabía, por lo que me guiñó un ojo y el maldito cabrón hizo que me diera un vuelco el corazón.
-Hola Callie- dijo él con su voz más seductora.
-Ho-Hola NNoland- conseguí decir tartamudeando.
Noté como Hannah y Débora hacían un esfuerzo sobrenatural para no reírse de mí, cosa que agradecía porque no sería la primera vez que se reían de mi en estas situaciones.
- Vengo a decirte que estás muy guapa, hace bastante que no te veo- hizo una pausa- y vosotras también- añadió torpemente mirando a mis amigas.
Me ruboricé tanto que creo que ni la base que llevaba puesta pudo disimularlo.
Sabía perfectamente a lo que se refería con eso y no era una manera muy sutil de decirme que me había mirado las tetas. Me habían crecido desde la última vez que nos vimos y al parecer se notaba bastante.
Se giró con intención de irse cuando se acordó de algo y me dijo- Ah, por cierto, este es Ryan. Es de Australia. Se mudó aquí y me llamó porque ya nos conocíamos de antes. Va a estar en nuestra clase.
-Encantada- dije apretandole la mano al chico al que se refería Noland. No me había fijado en él hasta entonces. Cualquier persona con ojos en la cara diría que es muy atractivo pero a mi me gustaba MUCHO Noland.
Con lo que añadió a continuación lo declaré mi enemigo mortal, y noté la mano de Débora agarrandome el brazo para que no saltara encima suya a matarlo.
-No hace falta que finjas, no pareces muy simpática, y no hay nada peor que los hipócritas- soltó.
-¿Pero tú quien te has creído que eres? ¿Cómo te atreves a venir aquí a insultarme sin conocerme? ¿Te digo yo que es peor que los hipocritas? TÚ- grité enfadada con él. Me di la vuelta y me fui, seguida por mis amigas quienes me intentaron calmar.
-Es un idiota tratándote así- bufó Hannah.
-Ya lo creo- exclamó Déborah- Bueno, tú ahora no te preocupes, vamos hacia la clase y te olvidas de todo lo que ha pasado. Por cierto, he oído que hoy Lilian da una fiesta en su casa para celebrar el inicio del año escolar y que los nuevos integrantes del instituto hagan amigos nuevos.- dijo.
Era cierto. Lilian Mayers daba una fiesta todos los años en su casa el primer día de clase. Era como una tradición. Sus padres eran ricos y ella tenía una casa para las fiestas, y, a pesar de que solo la usaban para eso, era más grande que la mía.
-No sé si me apetece chicas- murmuré más calmada.
-Claro que irás- dijo Hannah convencida- necesitas una fiesta para relajarte y lo sabes. Pasaremos a por ti a las siete. Sé puntual- una vez dijo esto me cogió del brazo y las tres nos dirigimos a nuestra aula del último curso.
Hola!!! Si os está gustando la historia me harías un favor votando y comentando.
¿Que os parece el chico nuevo? ¿Creeis que Callie ha reaccionado bien?
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Entre tú y una bala
RomanceMe llamo Callie y tengo 16 años. Estoy soltera y así he permanecido desde que nací. Eso no quiere decir que yo no le guste a los chicos, al contrario, muchos estaban dispuestos a arrebatarme la virginidad, pero yo me reservaba para uno en concreto. ...