❃.✮:▹Mejores Amigos◃:✮.❃

Fue En Esa Noche 🌙

Antes de iniciar me gustaría aclarar ciertas cosas;

🌙Ambos personajes son mayores de edad.

🌙Ambos personajes no me pertenecen.

🌙Si no te gusta el material que se va a presentar ahora, es momento para irse de aquí y buscar algo de tú agrado.

🌙No soy buena escribiendo así que esto dará Cringe U ´ᴥ' U

🌙Esta wea está muy larga, así que acomodate y disfruta ଘ( ᐛ ) ଓ

🌙Disfruten <3

🌞

La noche tenía una gran pinta de ser buena. No había nadie en las calles, no había autos ni nada que hiciera ruido, sólo el cantar de unos búhos y grillos... Y claro, el sonido de un par de pies corriendo a toda velocidad.

— ¡Te dije que no era buena idea colarnos así!.— Gritaba cierto Rubio enfurecido.— ¡¿En que estabas pensando?!

— ¡Deja de hablar y concéntrate en correr!.— Respondía el castaño.

Bastaron unos cuantos minutos para liberarse de esos hombres musculosos que querían acabar con ambos, o más bien sólo con el castaño.

Después de correr se escondieron en el callejón en donde se conocieron para recuperar el aire.

— Eso estuvo muy cerca... Jaja.— Rió de nervios.

— ¿Es enserio?... — Respondió, su mirada era de enojo.— ¡Pudimos morir por tu culpa!.— Señalo.

— ¿Mi culpa? ¿Quien era el que se quería meter a ese club? Además el Guardia se lo buscó, no es mi culpa que no entienda razones

— ¿Era necesario escupirle en la cara y meter a su madre en la discusión?

— Es la forma más rápida para que alguien de su tamaño se enoje, es de la vieja escuela.

— Da igual... — Saco su pequeño reloj de bolsillo y miro la hora, era tiempo de volver a casa antes de que fueran a despertarle como era costumbre por esos días.— Me tengo que ir, en unos minutos el Mayordomo vendrá a mi recámara para despertarme.

— Oh viejo, Debe ser divertido tener esas comodidades en tu hogar.

— No, no lo es... No te imaginas como es vivir un día en mi casa... — Con disimulo se apretó la muñeca, misma en la que tenía incontables cicatrices, producto de la regla que azotaba su padre cada que no tocaba una nota correctamente.

— ¿Ok?... Entonces me voy, mamá no ha regresado, tiene 2 días que no vuelve... y me preocupa un poco esa mujer...

— ¿No quieres ayuda?.

— No, me ha hecho lo mismo por años, o conoce a un nuevo hombre, o simplemente se queda en los bares. Descuida, te acostumbras.

Sin decir más, cada quien se fue por su lado. Sebastián escaló hasta llegar a  la ventana, aunque estaba un poco cansado y con notables ojeras, se colocó la bata que usaba al dormir y se arropó con la Sabana que portaba su cama.

Unos 5 minutos bastaron para que la puerta se abriera y un hombre con claros signos de edad avanzada y cara de amargado enterará sin tocar.

— Joven Sebastian.— Llamó al Rubio.— En unos minutos su padre le dará las clases de violín, será mejor que se aliste y haya llegado a la Sala de música antes que su padre, ¿Ha entendido?.