Díme.

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Ahora que te tengo, mi flácido corazón no se atormenta más de soledad.
Mi corazón torpe e ingenuo te quiere a escondidas.
Te sueña en silencio pues mi espera es tranquila, a tu llegada, donde nunca más te apartarás.
Díme una vez más, que soy tu princesa
Pues mi reino eres tú.
Me complazco en tu dulzura, tu amor y tu amargura,
Tómame y nunca me sueltes, pues soy un ser viviente arraigado a tu esencia.
Déjame ser tu final y acurrucarte en mis tiernos brazos, prometo no soltarte, cuidarte y respetarte.
Díme una vez más que soy tu princesa
Solo tuya y al servicio de nuestro Dios.
Díme que soy tu princesa, arrodillate ante ella y te concederé mi vida eterna,para compartirla hasta el fin de tus días.

versos callados.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora